El Gobierno y el PJ, en medio de una negociación compleja
La posibilidad de un acuerdo que contemple las necesidades del Gobierno y del justicialismo está latente. Se trata de decisiones de alta complejidad que pasan por varios aspectos. Desde ambos sectores se han dado señales para avanzar en la definición de temas que son centrales, y otros que forman parte de la letra chica de un eventual acuerdo. En el medio, la necesidad de garantizar los acuerdos que se plasmen. El manejo de los tiempos y las formas pasan a ser definitorios en un marco de desconfianzas recíprocas. Es posible que se habiliten las sesiones extraordinarias en la medida en que los progresos indiquen la posibilidad de decisiones positivas. La designación del flamante Jefe de Gabinete ayuda en la medida en que Capitanich conoce la problemática de Corrientes. En el plano de la Justicia, subsisten los puentes cortados por los otros dos poderes del Estado. La cuestión presupuestaria se halla sin resolución, con severas dificultades para cerrar el año y para atender un nuevo aumento de salarios reclamados por empleados, funcionarios y magistrados. El año legislativo concluye sin tratamiento a la reforma del Código Procesal Penal, cuyo proyecto perderá estado parlamentario. Tampoco está previsto que la Legislatura rechace los pedidos de juicio político reservados en Secretaría, que involucra a la cúpula tribunalicia.
En Corrientes no es mucho lo que queda para cerrar un año político particularmente duro que con tres elecciones tuvo por varios meses en vilo al casi millón de correntinos.