Un día después del anun­cio nacional del aumento en el cuadro tarifario ener­gético, que alcanzará un 37% a las provincias en el mes de marzo, las autorida­des provinciales se mantie­nen como lo hacen siempre. En silencio.

Solamente el interventor de la Dirección Provincial de Energía de Corrientes (Dpec), Enrique Vaz To­rres, se pronunció ayer y en tren de llevar tran­quilidad a los usuarios provinciales terminó admitiendo el impacto de las subas que en Bue­nos Aires van del 60% al 148%. “Estamos en plena discusión y queremos ser lo más sensatos posibles para poder informar a la comunidad. La medi­da del Gobierno nacio­nal tiene un sentido que afecte lo menos posible a quienes menos tienen. La tarifa social es un mecanis­mo que se tiene que ir aco­modando a la gradualidad del aumento”, explicó el interventor, quien además es el ministro de Hacienda provincial.

La semana pasada el se­cretario de Energía de Co­rrientes, Eduardo Melano, anticipó que podrían darse correcciones en las tarifas de los usuarios correntinos en los próximos meses. Vaz Torres había asegurado que no iban a producirse au­mentos, ayer modificó sus dichos: “Lo que buscamos es atenuar lo más que se pueda el impacto del incremento en la tarifa social. Sabemos cuál es la realidad de la gen­te y por eso Corrientes es la segunda provincia con más usuarios que gozan de la ta­rifa social”.

La provincia de Corrien­tes a mediados de diciem­bre pasado cuando acudió a la audiencia pública en Formosa, dada por la Enti­dad Nacional Reguladora de Energía (Enre), pidió que se cancelen las subas en el pre­cio de la energía que comer­cializan las empresas nacio­nales. La petición se hizo justamente ante el Enre que hasta ahora no se expidió al respecto. Las distribuidoras provinciales desde el 1 de enero pasado, pagan más cara la energía que compran a las transportistas.

Fuente:www.nortecorrientes.com