Una mujer de 33 años fue detenida por la Policía en la localidad santiagueña de Frías, acusada de haber intentando abusar sexualmente de un joven de 19 años. La agresora, según informaron desde la fuerza, actuó con la complicidad de sus dos hijas de 16 y 17 años.

"Si no me hacés el amor, te mato", le advertía la mujer mientras le apretaba la garganta con las manos. La Policía señaló que todo comenzó cuando el muchacho pasó caminando por la vereda de la casa de la acusada, donde lo redujo, lo obligó a entrar y lo encerró en una habitación, según publicó el diario "El Liberal".

"Luego lo conducen hacia una pieza donde lo acuestan sobre la cama. Cada una de las hijas lo tenía tomado de un brazo, mientras la mujer le exigía tener relaciones sexuales", informó un investigador.

"Como el joven no quería acceder, la mujer se le sube arriba de su pecho. Se saca la remera que llevaba puesta y lo obliga a que le bese los senos, insistiéndole tener relaciones sexuales", agregó. Como el joven se resistió, la mujer lo estranguló hasta desmayarlo.

Transcurrió una hora sin que el muchacho reaccionara, por lo que la atacante le pidió ayuda a un vecino y lo trasladaron al hospital zonal de Frías, donde fue asistido.

La investigación del hecho -que se conoció ayer pero ocurrió durante la madrugada del 3 de noviembre- está a cargo de la Unidad Fiscal de esa ciudad, que solicitó a la jueza de control de garantías Gabriela Núñez de Cheble que ordenara la detención de la sospechosa, medida que se concretó el martes.

La imputada está acusada del delito de "abuso sexual simple, lesiones y privación ilegítima de la libertad" y se encuentra alojada en la Comisaría 3ª del Menor y Mujer. La fiscalía solicitará pericias psicológicas y psiquiátricas tanto para la acusada como para el joven acosado.

 (DyN-Especial)