16 de junio de 2014
Aunque el río no llegue al nivel pronosticado la asistencia continuará en barrios ribereños
Si bien estiman que el Paraná no subirá mucho más, el Municipio sigue trabajando con las 150 personas refugiadas en los centros de las barriadas de Galván e Itatí.
Algunos vecinos optaron por trasladarse sólo algunos metros más en terrenos más elevados y próximos a sus casas por temor a los robos.
Apesar que la crecida del río Paraná no alcanzará el pico esperado para la Capital, las autoridades municipales y provinciales continúan alertas y siguen trabajando en las partes más afectadas. Además, el jefe comunal, Fabián Ríos, aseguró que la asistencia continuará aun cuando la gente haya regresado a sus hogares. Por su parte, vecinos de las zonas norte y sur de la ciudad optaron por autoevacuarse dentro de sus propios barrios, desplazándose algunos metros más arriba para no ser alcanzados por el agua y a la vez poder custodiar sus pertenencias.
La última medición registrada por Prefectura arrojó que el Paraná se estacionó en 6,99 metros en el puerto local, a sólo un centímetro del nivel de evacuación. En total hay 150 personas refugiadas en centros de evacuación dispuestos por la Municipalidad, asistidas con alimentos, ropas y colchones. Respecto a este panorama, el intendente Fabián Ríos confirmó a El Litoral que, si bien puede crecer un poco más, “el agua va a empezar a bajar y no vamos a tener más evacuados”, llevando tranquilidad a los vecinos de los barrios Galván e Itatí que visitó el sábado junto a la vicejefa comunal Any Pereyra.
Sin embargo, a pesar de tener a disposición los centros de evacuación, varias familias optaron por resguardarse en casas de vecinos y familiares dentro del mismo barrio, por temor a los robos que puedan ocurrir. El secretario de Desarrollo Humano, Diógenes González, se refirió a esta situación luego de haber recorrido barriadas del norte y sur de la ciudad: “La creciente se está disipando y la gente se refugia en su propio barrio para custodiar sus pertenencias. Algunos colocan muebles sobre barriles para evitar que se mojen y no tener que sacarlos”. Además comentó que “el 60 por ciento de los obrajes ladrilleros está bajo agua”, por lo que son las partes más comprometidas.
El sector de los ladrilleros despierta gran preocupación tanto en el Municipio como en la Provincia, ya que su actividad está paralizada por no poder utilizar la tierra para elaborar los bloques, por lo que el Gobierno provincial le otorgó tierras en el barrio Molina Punta para que puedan extraer de allí la materia prima. Ríos, por su parte, aseguró que “una vez que vuelvan a sus casas continuaremos con la asistencia”.
Si bien desde el Estado descartaron que el río llegue a niveles mucho más altos como estuvo previsto hace unos días, ambos gobiernos continúan alertas y siguen asistiendo a las zonas más vulnerables de la ciudad con ropa y comida. Un factor clave a la hora de coordinar los centros de evacuación fue la previsión desde el Municipio para que los vecinos pudieran prepararse y trasladar sus pertenencias mucho antes de que el agua avance.
Por otra parte, el jefe de Vías Navegables, Pablo Benítez, había anticipado a este medio que el nivel del río para Corrientes no llegaría a más de 7 metros el fin de semana. Más teniendo en cuenta que aguas arriba los niveles del Paraná van decreciendo.
En tanto en Itatí la última medición cerró en 7,63 metros en bajante, mientras que en Paso de la Patria se estacionó en 7,32.
Fuente:www.ellitoral.com.ar
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