22 de enero de 2018
Vecinos de San Miguel preparan corte de ruta, acuciados por fallas eléctricas
Pobladores juntan firmas para reclamar ante la Dpec, una vez más. ya fueron advertidos que en febrero habrá cortes diarios programados.
Siguen los cortes de energía en San Miguel, una localidad que mantiene latente la decisión de declarar la emergencia energética desde hace meses. Tras la llegada del generador móvil a fines de diciembre pasado, se suspendieron las interrupciones programadas de energía, en el horario de trabajo en la red de Caá Catí, que abastece a la zona. Pero ahora los pobladores alertaron a este diario que el aparato queda a menudo sin funcionar, debido a la falta de combustible. Desde la localidad, un grupo numeroso de vecinos viene presentando sendas notas a las diferentes oficinas provinciales para pedir por la normalización del servicio, el cual se interrumpe a diario. Los habitantes y las autoridades comunales se reunieron en diciembre para evaluar la declaración de emergencia eléctrica, pero esto quedó en suspenso ante la llegada del aparato. Ante nuevos cortes, un vocero de los vecinos dijo a NORTE de Corrientes que están determinando manifestarse nuevamente, esta vez con un corte total del tránsito en la Ruta Nacional 118. La decisión está en análisis, pero avizoran que esa es la única salida para reforzar el reclamo y lograr que la Provincia y/o Dirección Provincial de Energía de Corrientes (Dpec) renueve la red de distribución de la zona, trabajo que recién se está realizando en Caá Catí (distantes a 40 km entre sí). Los postes de madera caen con las lluvias y el viento y quedamos sin servicio. Como no hay personal suficiente en la Dpec ni móviles para la zona rural, la reparación lleva mucho tiempo. Dicen que al generador le falta combustible para funcionar, pero cuando funciona no alcanza a cubrir la demanda. Desde la Dpec local nos anunciaron que en febrero se van a realizar otra vez cortes programados. Muchos comerciantes tuvieron que comprar un grupo electrógeno, sino se le echaban a perder los helados, lácteos o carnes. Ahora, los vecinos ruegan que no caigan postes, sino será larga la espera para tener energía de nuevo. Estamos juntando firmas para continuar con el reclamo a la Dpec, pero un grupo de pobladores quiere salir a la ruta para reclamar, en busca de repuestas. Los postes son de palo o madera, se descomponen, no soportan los vientos y caen. Un jefe de la Dpec nos dijo que las grandes obras no van a llegar a San Miguel y menos el cableado, pues no tienen gente especializada, cerró.s
Fuente:www.nortecorrientes.com