No cuenten conmigo
Por Javier Núñez:
"No cuenten conmigo para disfrazar con eufemismos la brutalidad y la cobardía de ochenta tipos golpeando hasta matar a un pibe reducido e indefenso. Eso no tiene nada que ver con la justicia, ni siquiera en sus conceptos más arcaicos: la mal llamada "justicia por mano propia" no es sino venganza, y viene acompañada de una pena sumaria muchas veces irreparable. No mucho antes, cerca del lugar donde un grupo enfurecido de vecinos arremetió contra David Moreira, casi matan a golpes a dos chicos que iban en moto tras haberlos confundido con ladrones. El precipitado procesamiento público y la inmediata ejecución de la pena muchas veces deja de lado un principio básico de la sociedad: que el delito que se castiga esté suficientemente probado. Muchos hemos visto situaciones similares: basta con que alguien señale a otro al grito de "ladrón" para que se conformen grupos espontáneos de ajusticiamiento con los que difícilmente se pueda razonar. Pero aun suponiendo que el delito haya existido, la pena aplicada en forma de venganza constituyó otro mucho peor, más atroz, más irremediable. Matar a golpes a alguien que arrebata una cartera es de un desprecio por la vida ajena tan condenable como el de aquel que mata para robarla."