23 de enero de 2016
Bajó el río pero esperan un pico de ocho metros en febrero
Desde la Municipalidad indicaron que se preparan para asilar unos 150 evacuados. En la actualidad hay 70 familias albergadas en distintas reparticiones de la Comuna y otras 18 en el Regimiento Nº9.
i bien el río Paraná bajó unos centímetros y trajo alivio a los ribereños, ya que se encuentra en 7,37 metros la última marca, desde la Comuna anticiparon que de acuerdo a las previsiones se viene otro pico de creciente en febrero, que podría llegar a los ocho metros.
Por estas horas la Municipalidad se maneja con los datos de distintos organismos, incluidos el Instituto del Agua y el Ambiente en Corrientes (ICAA), Prefectura; la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), y además incorporó otras fuentes de información empíricas.
Es el caso del comportamiento de los caudales que se originaron en la creciente del año 1980, cuyos informes son tenidos en cuenta ya que según precisaron áreas de contralor se repite la misma tendencia de aquellos años.
Celeste Lazarini, de Acciones Directas y Compensatorias de la Comuna, encargada de revisar la situación de los vecinos costeros, comentó a época que por estas horas, se continúa con la asistencia a las 70 familias evacuadas, descontando aquellas que se albergaron en la Escuela Nº299 que pasaron al Regimiento Nº9.
Consultada Lazarini acerca del comportamiento del río Paraná, comentó que si bien el río bajó y se encuentra estacionado, “se prevé otro pico de crecida superior a los 7,47 metros, y podría llegar a los ocho en febrero. Nos guiamos mediante los gráficos de ICAA y mediciones de Prefectura y además por las mediciones que datan de 1980 cuando el pico fue de ocho metros”.
Lazarini destacó que “el patrón de comportamiento es el mismo que en la actualidad, suponemos que de cumplirse este parámetro vamos a tener 150 familias evacuadas en Capital, no obstante con el Municipio estamos adoptando todas las medidas, haciendo los relevamientos de familias que podrían surgir afectadas, algo que seguramente vamos a comunicar a principios de febrero”, sostuvo.
La funcionaria resaltó que gracias a las donaciones de la comunidad hoy pueden atender la demanda de las 70 familias albergadas en distintos espacios municipales. Anticipó también que las casas precarias de madera en la ribera están en estado de putrefacción, y por lo tanto ven que en marzo, cuando pasen los efectos del fenómeno climático de “El Niño”, deberán responder a un nuevo problema que será las pérdidas de los damnificados. Por otro lado también precisó: “Estamos trabajando en una campaña muy fuerte de prevención por el tema dengue, asesorando sobre la prevención y precaución para evitar contagios; la gente usa muchas espirales, además se habla mucho de los cuidados que hay que adoptar con el agua, para no dejar recipientes expuestos. Hay que recordar que el mosquito no se cría en agua sucia, sino a la sombra”, comentó .
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Tareas de contención
Con el objetivo de minimizar el impacto de la creciente del río Paraná y del fenómeno climático de “El Niño”, agentes sanitarios municipales distribuyeron elementos básicos, alimentos, agua envasada y realizaron controles médicos a familias de distintos barrios costeros.
Agentes sanitarios del Municipio, principalmente médicas y enfermeras de los SAPS de esas comunidades costeras, también reforzaron sus recorridos acercando atenciones gratuitas, remedios, repelentes, elementos de primeros auxilios y aplicaron vacunas a niños y adultos en riesgo.
Puntualmente, agentes de la SAPS del barrio Santa Marta distribuyeron agua a familias en riesgo y realizaron asistencia médica domiciliaria además de la habitual asistencia en la Sala.
Fuente:diarioepoca.com