OPINIÓN
12 de octubre de 2024
Reducción de sobrecargos de la deuda con el FMI
La reducción otorgada por el FMI es de apenas 0,65 puntos de tasa sobre los 4 puntos de sobretasa que cobran. Respecto a los pagos totales por intereses que debe realizar el país, el alivio es de apenas poco mas del 9%.
Circula como información la decisión del FMI de reducir las sobretasas que pagan los países cuyo endeudamiento con el organismo supera un determinado porcentaje de la cuota.
Lo mencionado tiene una doble presentación mediática. Por un lado, señalando el fuerte ahorro que tendría el país; por otro, destacando la gestión hecha en su momento por el ex Ministro Martín Guzmán en la negociación realizada durante el gobierno de Alberto Fernández.
Respecto al primer punto, versiones periodísticas han llegado a decir barbaridades tales como que la Argentina se ahorraría 12.000 millones de dólares.
Otras fuentes, un tweet del Secretario de Finanzas Pablo Quirno, que reduce el ahorro a 3.600 millones de dólares. Aclaremos.
La reducción otorgada por el FMI es de apenas 0,65 puntos de tasa sobre los 4 puntos de sobretasa que cobran. Respecto a los pagos totales por intereses que debe realizar el país, el alivio es de apenas poco mas del 9%.
Por ende, estamos entre unos 300 o 350 millones de dólares por año. Bien lejos de los 12.000 millones de dólares de ahorro y más cerca (por debajo también) de lo twitteado por el Secretario de Finanzas.
Pero hay que aclarar que los 3600 declarados por el Secretario son a lo largo de 8 años. En realidad, nuestro cálculo nos da un ahorro de 2.800 millones de dólares en los 8 años.
Lo expuesto señala también, lo exigua que era la tan mentada reducción de sobretasa con la que Guzmán y Alberto decían mantener una ardua batalla con el FMI. Razón además por la cual terminaron abandonando una posición de mayor dureza con el FMI y validando monto, tasas y plazos de la estafa que Macri y el FMI impusieron al pueblo argentino.
La cuestión que nunca se entendió fue el carácter geopolítico que tuvo el crédito que recibió el MACRISMO, que su objetivo clave era mantener el control de la política económica de la Argentina en manos de la estrategia del capital financiero y la política norteamericana en la región.
Y que por lo tanto, el stand by del Macrismo debía afrontarse de manera tajante, por fuera de las reglas convencionales de otras negociaciones, rechazando la capacidad de imposición del FMI y cuestionando la falta de respeto del organismo sobre su propio Estatuto.
Alberto Fernández y Martín Guzmán dilapidaron el capital político que tenía el Frente de Todos, e incluso las condiciones que abría la existencia de un mundo en pandemia para suspender pagos, patear negociaciones, poner en auditoría y revisión el proceso de endeudamiento y fuga generado por Macri y un FMI que apartó completamente su comportamiento de las reglas que su Estatuto le imponía. Esgrimiendo la supuesta ventaja de la eliminación de la sobretasa (que a la luz de lo que hoy termina ocurriendo, queda claro que no era más que un verdadero espejito de colores) validaron la estafa macrista.
Fuente: claudiolozano.com.ar
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