Debido a los robos y actos vandálicos sufridos en los últimos años, en los colegios Quintana y Liceo Ferré están preocupados por la seguridad de sus edificios durante estas vacaciones. En la institución del barrio Libertad, los directivos se turnan para hacer una vigilancia del establecimiento; mientras que en la otra Secundaria esperan la construcción de un muro perimetral que podría darse en marzo.
Así como hubo muchos casos de actos vandálicos en escuelas de Corrientes durante el ciclo lectivo pasado, y también en años anteriores, en dos colegios capitalinos la situación fue más que complicada: la escuela secundaria del barrio Fray José de la Quintana, y el Colegio “Brigadier General Pedro Ferré”. En ambas instituciones soportan desde hace tiempo el ingreso de personas ajenas por falta de un muro perimetral (o la adecuación del ya existente), y debido a esto tuvieron constantes robos y destrozos.
Otro de los denominadores comunes para este inconveniente es la falta de actividad en los establecimientos. Los actos vandálicos suelen ocurrir durante los fines de semana o feriados cuando  en los colegios no hay clases y, por ende, tampoco hay alumnos, profesores o directivos.
Por esta razón, las autoridades del Colegio Ferré optan por turnos para concurrir al establecimiento en estos días, o por lo menos estar atentos a cualquier situación que pueda presentarse. También, cuentan con la presencia de los habituales porteros, como para tener más movimiento en la institución.
La vicerrectora de dicha escuela, Alejandra Esquivel, explicó a El Litoral que “nosotros dejamos guardias entre porteros y directivos. Para enero van a estar de turno la rectora y el coordinador pedagógico, y en febrero entraremos la otra vicedirectora y yo”.
Por su parte, en el colegio Quintana el problema es similar, pero la situación veraniega distinta. Por lo menos hasta el momento no hay vigilancia propia en el edificio, que ya ha sido vulnerado al menos siete veces durante el año pasado.
Al ser consultado sobre la posibilidad de una guardia durante el período estival, el vicerrector del establecimiento, Fernando Alvarez, señaló a este medio que “terminamos las clases pero no se acordó nada, así que no queda nadie en la escuela, ningún portero. Queda a la buena de Dios, y siempre fue así porque nunca hubo una designación de un sereno o nada por el estilo”.
Si bien aseguró que “el verano pasado fue digamos que tranquilo”, hubo “destrozos en el salón de actos, donde están los ventiladores, que doblaban las paletas”. “Eso, y capaz que algún escrito en la pared”, agregó.

Patrullaje
En noviembre del año pasado, vecinos de varios barrios habían solicitado a la Defensoría del Pueblo que pida al Ministerio de Seguridad la presencia policial en los horarios de salida y entrada de los colegios. Este accionar ya está siendo dispuesto por dicha cartera en la ciudad, aunque en agosto el ministro Horacio Ortega había señalado a este medio que de igual manera “los hechos vandálicos no se pueden evitar”.
El funcionario había recordado que desde hace unos años se implementa en algunos establecimientos una serie de medidas para mantener la seguridad en los mismos, como la colocación de alarmas y botones antipánico. “Nuestro trabajo lo hacemos en conjunto con las escuelas. Con Educación lo hemos hecho en un principio, desde el año pasado, con la colocación de las alarmas y creemos que tenemos que volver a tomar esas decisiones”, había manifestado.
Asimismo, en junio hubo denuncias mediáticas de intentos de secuestro en algunos establecimientos, aunque desde Seguridad argumentaron que las mismas nunca fueron denunciadas. Aun así, todo fue investigado, pero remarcaron a los tutores no dejarse llevar por “denuncias de Whatsapp”.

Muros
Una cuestión básica como la existencia de un muro para evitar ingresos ajenos es todavía una necesidad para la escuela Quintana. La mayoría de las veces que tuvieron actos vandálicos en la institución se debió a que cuentan sólo con un alambrado en el exterior, el cual fue roto y los propios alumnos se encargaron de la reparación del mismo en varias oportunidades.
Pese a esto, el vicerrector del establecimiento estimó que para marzo podría comenzar la construcción de las paredes faltantes, puesto que la gestión está en carpeta y restaban detalles para su ejecución.
“Tengo entendido que cuando comenzaban las actividades de este año supuestamente iban a empezar las obras del muro perimetral”, afirmó Alvarez, aunque aclaró que “no se puede confirmar porque en septiembre (pasado) nos habían dicho lo mismo y después no pasó nada. Estaba todo en proceso, teóricamente nos dijeron que la plata estaba y  que por eso al comienzo del ciclo comenzarían con las obras”.
Al mismo tiempo, adelantó que “parece que nos van a hacer ampliaciones de algunos salones también”.
Por otro lado, en el Colegio Ferré atraviesan por una circunstancia parecida, ya que si bien cuenta con un muro perimetral, el mismo es bajo en altura y muchas veces ingresaron personas ajenas a la institución. De hecho, en octubre de 2015 se había difundido el video de una pareja ajena a la escuela, manteniendo relaciones sexuales en el patio, tras haber ingresado durante un fin de semana largo.
Si bien su pedido también está en carpeta, a diferencia del escuela Quintana en la Ferré todavía no hay novedades sobre una posible elevación del muro. Cabe recordar que en 2015 también esta escuela había sufrido un grave incendio accidental, por lo que se invirtió mucho dinero en una refacción integral.
“Sé que en algunos colegios iniciarán obras de realización de muros, pero en el nuestro todavía no tenemos novedades”, comentó Esquivel. 

Fuente:www.ellitoral.com.ar