Por Matías Resano
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"Mi nena no quiere volver al jardín porque tiene miedo”, reveló la mamá de una pequeña, de 4 años, quien luego de reflejar un comportamiento completamente extraño al habitual, le confesó a su madre que fue abusada por una maestra suplente en un establecimiento de educación inicial, de la localidad bonaerense de Derqui.

La docente debió ser apartada de su cargo ante las insistentes denuncias de la progenitora de la niña. Un llanto desconsolado y su negativa a no concurrir al Jardín de Infantes Nº 924, de Derqui, partido de Pilar, alertó a su madre, Verónica Aguirre, quien ya estaba preocupada por sus constantes caprichos, reacciones violentas, más allá de que también se orinaba encima.

Fue entonces que Verónica comenzó a interrogar, en forma frecuente, a su hija, a fin de que le revelara las razones de su extraño comportamiento y de su deseo de no acudir al recinto educativo los martes y jueves, días en los que se llevan a cabo las clases de educación física.

Justamente, sería a la profesora de esta área a quien la menor se refirió frente a su progenitora, expresando que “la ‘seño’ es mala’”. Una consideración que llamó aún más la atención de Aguirre, quien le preguntó el por qué de semejante impresión, obteniendo como respuesta una confesión escalofriante.

“La ‘seño’ me tocó la cola y ahí abajo. Además me dijo que no se le cuente a mamá”. Por lo tanto, en la mañana siguiente, el lunes 15 de agosto último, la desesperada madre acudió a las autoridades del centro educativo, pero “la dirección no tomó en serio lo que mi hija me había contado, nos ignoraron y me pidieron que no hiciera conventillo”, razón por la que finalmente se dirigió a la Comisaría de la Mujer de Pilar en afán de radicar la denuncia, tomando intervención la oficina de inspectores educativos del distrito, la cual ordenó apartar a la docente implicada.

No obstante, Verónica alertó que “mamás de un colegio del barrio Monterrey me dijeron que trabaja allí”.

Traumada

Mientras espera la designación de la fiscalía de turno para que asuma la causa, la niña le pidió a su madre no retornar al jardín y en consecuencia Aguirre debió interrumpir el año escolar de su hija, producto de su angustia y temor, como asimismo de la falta de respuestas y contención de los responsables del establecimiento, que “intentan mantener oculto lo que pasó”.

Sin embargo, los médicos particulares que brindaron asistencia psicológica a la criatura le informaron a Verónica que “tiene un comportamiento compatible con un abuso sexual”.