13 de agosto de 2016
Condenan 16 años de prisión a abusador de su propia hija
El Tribunal de la Cámara Penal N° 2 de Catamarca condenó por unanimidad al hombre por el delito de "abuso sexual con acceso carnal continuado" y "agravado por el vínculo". El salvaje violó a su descendiente durante veinte años.
El debate fue oral por tratarse de una instancia privada y el acusado deberá cumplir 16 años de prisión efectiva en el Servicio Penitenciario Provincial de Miraflores.
El fiscal Gustavo Bergesio, en su alegato, dijo que "quedó demostrado que el padre abusó sexualmente de su hija durante casi 20 años, por lo que solicito una condena a 16 años de prisión efectiva".
Una amiga de la infancia de la víctima en su testimonio recordó que "cuando eran niñas, la denunciante le relató los abusos sexuales a los cuales la sometía su padre, quien aprovechaba cuando estaban a solas para realizar las aberrantes prácticas sexuales".
Luego de este testimonio prestaron declaración dos testigos ofrecidos por la defensa, quienes señalaron conocer al acusado, pero que "hacía años que no tenían contacto con él" y agregaron que "nunca vieron un comportamiento extraño para con su hija, que se trataba de una relación normal de padre e hija”.
También, en el marco del debate, otra de sus hijas denunció haber sido abusado sexualmente por el sujeto.
De acuerdo al testimonio, la menor tenía solo 6 años cuando su propio padre comenzó a abusar sexualmente de ella. Actualmente, la joven tiene 23 años, aunque los hechos fueron denunciados recién en 2010. Según confirmó la propia víctima, su hermana menor -que actualmente tiene 22 años- decidió hablar y contar que su padre también abusaba sexualmente de ella.
El novio de la joven y padre de sus hijos aseguró: "la estoy acompañando porque estoy cansado de escucharla llorar todas las noches”.
Dijo que "su suegra también la ampara, pues la madre de la denunciante defiende a su marido, quien permaneció prófugo casi tres años tras la denuncia de su hija en el 2010 y no se comunica con la joven".
Finalmente, ante una fuerte custodia policial, el padre abusador fue trasladado al penal de Miraflores, a unos 20 kilómetros al sur de la capital.