10 de abril de 2014
El Gobierno minimiza el paro e insiste en vincularlo con Massa
Se trató de "un gran piquete nacional con un paro de transporte", consideró Capitanich sobre la huelga convocada por las CGT y la CTA opositoras.
El Gobierno desestimó este jueves el impacto de la huelga nacional de las centrales sindicales opositoras y sostuvo que se trató de "un gran piquete nacional con un paro de transporte".
"Nosotros consideramos que lo que se observa es la organización de un gran piquete nacional con un paro de transporte", sostuvo el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, en su habitual conferencia matutina en la Casa Rosada.
Y, acto seguido, sostuvo que la medida tuvo "un líder visible", el titular de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, quien -sostuvo- "a partir de esta acción opositora es el líder del Frente Renovador que suma a Sergio Massa", "el líder indiscutido de la CGT opositora y se ha convertido en un referente de izquierda que estaba buscando un nuevo liderazgo".
El jefe de ministros apuntó, además, que "la estrategia de este arco opositor pasó por sitiar a los grandes centros urbanos", lo cual -sostuvo- "es una metodología a la vieja usanza del Medioevo, de la Edad Media, cuando los feudales utilizaban estos mecanismos de impedimento de acceso a la población".
"Nosotros consideramos que no hay lugar para la barbarie, para medidas que conspiran con el libre ejercicio de los derechos, tanto al trabajo como a la huelga", subrayó y agregó que si bien "en la agenda siempre es necesario ejecutar algo, no se puede recurrir a una medida de carácter antidemocrático, que impide el acceso al derecho legítimo de trabajar".
Fuente: produccion programa radial " Me Hago Cargo