Colombi juró por la profundización de un modelo sustentado en la previsibilidad
Ricardo Colombi y Gustavo Canteros juraron anoche como gobernador y vice. Hecho histórico por la continuidad institucional y porque se consumó la reelección habilitada por la reforma de 2007. En su discurso el mandatario trazó sus objetivos: la profundización de un modelo de provincia sustentado en la previsibilidad, el respeto por la palabra, la mesura y la paz social, remarcó.
Los actos de jura y asunción de Ricardo Colombi, ocurridos en la noche de ayer, primero en la Legislatura y luego en la plaza 25 de Mayo, frente a Casa de Gobierno, pasaron a la historia por constituir una inédita continuidad institucional sumada a la novedosa reelección, que se consumó finalmente luego de ser habilitada por la Convención que juró en 2007 la nueva Constitución de la Provincia.
Colombi se convirtió en el primer gobernador reelecto de Corrientes y en uno de los pocos en ostentar un record de tres mandatos, sólo superado por los cuatro de Pedro Ferré; y en ese carácter juró ante la Asamblea Legislativa, ampliada tras la última elección, por Dios y la Patria, haciendo un llamado a la unidad y a la consolidación de la democracia, prometiendo más trabajo para lograr lo que trazó como su nuevo objetivo: la profundización de un modelo de provincia sustentado en la previsibilidad, el respeto por la palabra, la mesura y la paz social.
Fueron esos los ejes del discurso que por 18 minutos leyó e improvisó ante los legisladores e invitados que colmaron el Palacio Legislativo.
Colombi asumió, casi como en todas las ocasiones en que cumplió este protocolo, tres veces desde 2001, en un clima enrarecido. El de ayer por la situación de caos que se respira en el país y que con mayor intensidad se vive en la vecina provincia del Chaco, por las consecuencias que sigue teniendo la crisis salarial con las fuerzas de seguridad, que desbordó en saqueos y muertes.
Pero también por la situación que vive Corrientes en ese sentido, que posterga desde hace días un entendimiento definitivo con los policías, que ayer mismo cortaron calles resistiéndose a pactar un acuerdo en etapas con el Gobierno, aunque el conflicto tendía a replegarse.
Además, porque su pueblo natal, Mercedes, está sumido en una profunda crisis institucional generada por trabas a la asunción del electo intendente Víctor Cemborain, que viene sumando desencuentros y que ayer tuvo un episodio bochornoso (ver más en páginas 18 y 19). La oposición del Frente para la Victoria incluso utilizó el marco de la Asamblea Legislativa para hacer notar ese descalabro, pidiendo, en la voz del senador Rubén Pruyas, respetar la decisión de la sociedad.
El Gobernador no desconoció la situación general, pero sólo eso.
Al iniciar su discurso admitió que asume en una “situación especial”, como siempre, según dijo, fue su camino en la vida. “Difícil”, aunque siempre consiguió superarlos con el acompañamiento de la gente, del millón de correntinos que volvió a depositar en él la confianza para el gobierno.
Dijo ser optimista en lo que vendrá, porque conoce palmo a palmo la provincia. Y porque no sabe de “obstáculos ni de excusas”, y además porque está convencido, dijo, de que “el futuro no es sólo una construcción del Estado”, sino de toda la sociedad.
“Los logros de la política -añadió- deben visualizarse en la vida cotidiana” de la gente. El más importante de esos logros, desde hace 30 años, es la democracia, “que es de todos”, pues nadie puede atribuirse logros personales en ese sentido, remarcó.
Habló del voto y dijo que “debemos cuidarlo y ejercerlo con responsabilidad”, ya que “nunca más debemos permitir las intervenciones federales a ningún poder del Estado”. Fue esa la frase que arrancó la primera aclamación de los presentes, muchos de los cuales eran jóvenes militantes del radicalismo que coparon los balcones del recinto de sesiones.
Profundizar el modelo
El discurso inaugural de este nuevo período de gobierno, que Colombi transitará en compañía de Gustavo Canteros, elegido vicegobernador como referente de un sector del justicialismo, fue más bien general. No obstante sirvió para que el mandatario trazara líneas más descriptivas que de acción, que seguramente reservará para la apertura de sesiones en marzo.
Ayer habló de Corrientes como “una provincia saneada”, que además ha firmado un pacto de desarrollo inédito. De una provincia que necesita más infraestructura, pero que avanza en ese camino, aun accediendo para ello a “endeudamientos moderados”.
Reiteró como valor la previsibilidad, causa y efecto que lo trajo hasta este momento histórico. “Saben ustedes que no hemos aflojado en las malas y tampoco en las buenas”, argumentó, para luego recordar la soledad a la que se enfrentó en 1991, cuando juró como intendente de Mercedes por primera vez. Lo mismo que ocurrió en 2001 ya en el gobierno, luego en 2009 y finalmente el 15 de septiembre.
“La racionalidad, la tranquilidad, la previsión y la palabra” nos trajo hasta acá, dijo en general, tal vez queriendo referir que nada, ni el conflicto policial actual, lo sacará de esa postura.
Es que a renglón seguido pidió a todos actuar con mesura y con responsabilidad para no generar ni volver al caos. “La provincia -subrayó- está por encima de lo sectario”.
Ya sobre el final de su alocución se autodefinió como un gobernador de carne y hueso producto de su enseñanza, la que le dieron sus padres y maestros; un gobernador que camina al lado de la gente, “nunca atrás ni adelante”. Luego invitó a todos a aportar lo que puedan, con responsabilidad, para sacar a Corrientes adelante.
Fue lo último que dijo antes de dar por terminada la Asamblea y recibir el saludo de los presentes, acto previo a la asunción que se concretó minutos después ante el público que lo esperaba para ovacionarlo en la Plaza de Mayo. (EOL)
Fuente:www.ellitoral.com.ar