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2 de abril de 2022

"Es una herida que no cerrará jamás"

Gabino, cuarto hijo de la familia Ruíz Díaz fue uno de los soldados que no volvió a su hogar. Fue el primer soldado identificado en las Islas. "Fueron 13 jóvenes de San Roque que fueron a la guerra. Gabino fue el único que no volvió", expresó Idelina en una entrevista con diarioepoca.com.

Por Mónica Pared

Redacción de época

Hoy 2 de abril el corazón se estruja más que los otros días, el recuerdo aflige y el alma añora a los que ya no están. Esos valientes soldaditos que dieron la vida por Malvinas y no supieron que iban a quedar inmortalizados en aquella guerra por "dos pedacitos de tierra", como nos cuenta Idelina. 

Idelina Ruíz Díaz es hermana de Gabino, el primer soldado y primer excombatiente correntino en ser identificado en el cementerio de Darwin en las Islas Malvinas. En fechas como las de hoy, recorre escuelas donde homenajean a su hermano, antes lo hacía su mamá, Elma Peloso de Ruíz Díaz pero por la pandemia dejó de asistir para cuidarse. 

Los recuerdos afloran, pese a que pasaron 40 años de la Guerra de Malvinas. Muchas familias todavía no entienden sobre la pérdida de sus seres queridos que quedaron allá en las Islas. 

"Nosotros somos de Colonia Pando, San Roque. Gabino tenía 17 años cuando tuvo que ir a Malvinas. No te preguntaban si querías ir, te mandaban", comentó Idelina en la charla con diarioepoca.com. "Éramos ocho hermanos, ahora nos quedamos siete", dijo.

Gabino Ruiz Díaz fue el primer "Soldado argentino sólo conocido por Dios" que fue reidentificado en Malvinas.  Sobre ese proceso, Idelina recordó: "Un excombatiente de La Plata, Julio Aro, venía buscando a una madre llamada Elma Peloso, madre de Gabino. Vino y paró en un kiosco acá cerca, en San Roque donde vivo actualmente, y el kiosquero le dijo "sí, yo le conozco a la hermana y le mandó para casa", relató. "Allí me dijo "estoy buscando a la madre de Gabino, Elma Peloso Ruiz Díaz, al padre y hablar con ellos porque venimos por un proyecto que si Elma no acepta seguiremos con la lista de los soldados que estaban bajo el nombre "solo conocidos por Dios". Lo llevamos al campo, habló con mi mamá y le preguntó si quería firmar para hacer el ADN. Ninguna mamá en ese tiempo quería firmar y ella no tuvo problemas porque quería saber dónde estaba su hijo, si era verdad que estaba muerto o estaba vivo…en ese tiempo había incertidumbre".

La mujer continuó su relato, "Aro se fue de vuelta a Mar del Plata, presentó todo y habló con el inglés que le enterró a Gabino y a todos los soldaditos. Después vinieron y le sacaron un poco de sangre a mi mamá y a mi hermana mayor".

"Pasaron los meses, volvieron a pedir una autorización para poder entrar en las Malvinas y realizar los análisis. Después de que mi mamá dijo que sí y firmó, todas las otras madres comenzaron a firmar. Ella dio el paso inicial", comentó.

"Después de mucho tiempo supimos dónde está Gabino, hoy nos vamos y sabemos que está en esa cruz", dijo contundente la hermana del joven soldado.

"Después de mucho tiempo supimos dónde está Gabino, hoy nos vamos y sabemos que está en esa cruz", dijo contundente la hermana del joven soldado.

"En el año 2018 viajé junto a uno de mis hermanos, a las Malvinas. Nos anotó mi mamá y fuimos los primeros en ir. Hace dos años, mi mamá viajó. Ahora sabemos que él está ahí".

La llegada de los soldados y Gabino no estaba entre ellos

Entre la esperanza de volver a ver a su hijo, Elma fue a esperar a Gabino, contó Idelina. "Recuerdo que mi mamá vendió dos animales para poder pagar como remis a un hombre de campo y poder ir al pueblo de Mercedes para la llegada de los soldados. Cuando iban llegando, le informaron a mi mamá que él llegaba al otro día. Entonces, mi mamá nuevamente, de madrugada, al otro día viajó a Mercedes. Nunca apareció Gabino, nadie sabía decirte".

"Un día, y me acuerdo patentemente, llegó un Capitán del Ejército desde Buenos Aires y vino a casa con el intendente de ese entonces, Muniagurria, y les dieron la noticia a mis padres que Gabino quedó en Malvinas, se murió en Malvinas. Fue lo peor que pudo pasar. Les hablaron, les contaron cómo fue el asunto y que el seguro de vida de él estaba a nombre de mi papá y así empezó todo", sostuvo. 

"Él (Gabino) fue el único que no volvió a Colonia Pando-San Roque. Eran 13 soldados por él. Volvieron 12".

"Para nosotros todos los días es un dolor. El día a día pasa y sabes que tu ser querido ya no vuelve. Más nosotros, los hermanos que nos ponemos en edad. Hacíamos la escuela con él. Recuerdo que yo estaba en segundo grado cuando Gabino se fue a las Malvinas. Soy una de las más chicas de los hermanos, tengo uno más chico que yo", explicó. 

"Para nosotros todos los días es un dolor. El día a día pasa y sabes que tu ser querido ya no vuelve", compartió Idelina.

"Ver todo lo que pasó y yo sufro mucho porque siempre estoy con mi mamá y ella siempre me dice "soñé por tu hermano" y uno no tiene palabras. ¿Qué le puedo decir a una mamá?, no hay palabras de consuelo. Ella me cuenta y yo nose qué decirle, trato de llevarle esas cosas que me está contando. Ella sueña por su hijo o escucha que le golpean la ventana. Porque Gabino cuando volvía de diligencia, él siempre le golpeaba la ventana a mi papá y a mi mamá porque siempre llegaba al mediodía. Entonces ella siempre dice que escucha, al igual que mi papá cuando vivía. Y siempre que se aproximan estas fechas sucede", confío Idelina.

"En estas fechas te remueve todo, las historias. Los soldados que cuentan sus historias. Yo me casé con un veterano de guerra, hace 35 años que estamos casados. Él estuvo en la misma Compañía que Gabino y siempre recuerda. Escuchar esas cosas no me hace bien. Él a la noche no puede dormir por lo que vivieron allá", explicó.

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Las secuelas de la Guerra

En este sentido dijo "a veces digo que la gente no entiende que a ellos les hace mal. Pero uno tiene que estar al lado, no te queda otra. Acompañar de alguna manera. Vivir con un veterano de guerra no es fácil", contó.

"Ellos siempre dicen que los hijos y las esposas son los únicos que entienden. Y sí, somos los que vemos el día a día, ya sabemos por los años que estamos con ellos", indicó. "La mayoría de ellos ya están cumpliendo 70-71 años, toda una vida con este trauma", sostuvo.

"Los primeros días que ellos volvieron de las Malvinas, eran feísimos. Ellos nunca tuvieron apoyo de nada, ni de psicólogos ni nada que los ayudara a sobrellevar esto. Ellos quedaron en el olvido", precisó. "Fueron abandonados totalmente".

Idelina contó sobre sus recorridas por las escuelas, "hoy (por el viernes) a las 8 salimos con siete veteranos, nos fuimos al campo, a las escuelas y estamos volviendo recién a las 17- 18 horas. Y los chicos preguntan y preguntan, y los profesores también", relató. 

Idelina tiene tres hijas, consultada sobre ¿cómo uno transmite a los hijos estas vivencias de las Malvinas, le tener un esposo veterano y perder un hermano?, "ellas siempre escucharon que su papá habla de su tío (Gabino), su abuelo también. Ellas se criaron en un ambiente en el que siempre se habló de lo que pasó, de cómo fue, la historia. Su abuela también. Hay videos. Yo que viajé a las Malvinas les conté. También conversan en el Colegio, en fin, se criaron con esta historia", resumió. 

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El viaje a Malvinas

¿Cómo fue pisar las Malvinas?, fue consultada Idelina quien viajó junto a uno de sus hermanos, a conocer la tumba de Gabino. "Cuando mi esposo me contaba de cómo era todo, nunca le di mucho artículo, era como una cosa que uno escucha nomas pero no ves y no sabés. Pero cuando me fui a las Malvinas y vi lo que era, me quise morir", confesó Idelina. "Lo que era ese campo, montañas, piedras, el frío. Era una cosa de terror. Encima ahí donde murió mi hermano, está el cementerio. Cuando llegué ahí, no podía creer. Se te parte el alma. A mí me hizo re mal. Mi hermano entró en un estado de nervios y en una crisis", recordó. Dijo "mirá que te hablan y te preparan antes de que viajes a las Malvinas, pero no es suficiente", expresó con dolor.  También comentó que en las Islas "todavía hay restos de la guerra, pedazos de avión, todo te conmueve", resaltó.

Para finalizar Idelina compartió "creo que la sociedad nunca valoró a los excombatientes. Eran los loquitos de la calle, esos que cobran un sueldo, como si fuera que ellos no participaron de una guerra. Creen que cobran por cobrar. Nadie sabe lo que pasó un veterano de guerra, las secuelas".

"Cuando pasó lo de los incendios, era un loquero, por un avión que pasa arriba de tu casa tiembla todo, cómo era todo allá en Malvinas, donde estaban solos, donde no tenían dónde refugiarse, donde estaban entre chapas y todo era agua, barro, frío. Donde no tenían ni qué comer y tener al enemigo enfrente tuyo", describió con crudeza. 

"Se lo que es porque convivo con un veterano, porque tengo una mamá que perdió su hijo. Para nosotros todos los años es una herida abierta que nunca se va a cerrar. Ni siquiera no le vimos, ni pudimos despedirlo, nada", sostuvo.

Gabino de San Roque, numerario del Grupo 2, Sección Exploraciones, del Regimiento de Infantería 12 de Mercedes "General Arenales", caído en Darwin el 28 de mayo de 1982, yace en Malvinas y su familia nunca lo olvida. 

Fuente:www.diarioepoca.com

 



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