5 de febrero de 2015
Arde Goya: Gerardo Bassi echó a 100 empleados y aprieta a periodistas
Los despidos son de corte meramente políticos. Junto a su hijo Marcos, organiza reuniones partidarias y pasa lista con el padrón de empleados precarizados de la Comuna. Amenazaron de muerte al periodista que entrevistó al diputado Vassel.
La situación institucional de la comuna de Goya, la segunda ciudad de la provincia, genera preocupación. A la denuncia de despidos en la Municipalidad por no afiliarse al Partido Justicialista (PJ) se suma ahora el apriete a los periodistas que les otorgan espacios radiales a los opositores o que brindan una opinión crítica respecto de la gestión del jefe comunal Gerardo Bassi.
En diálogo con La República, el diputado provincial goyano del Partido Popular, José Vassel, confirmó que a los 50 despedidos que había denunciado el martes, se sumaron 50 nuevos ayer, lo que da un total de 100 empleados despedidos que no quisieron afiliarse a la escuadra de Perón y Evita. La mayoría de estos en una precariedad laboral pocas veces vista y que va a contrapelo de lo que se esgrime a escala nacional de combatir el trabajo en negro.
“Realmente no se entiende. Levantan las banderas peronistas y van en contra de esa doctrina que siempre estuvo al lado de los trabajadores. Despiden al personal por cuestiones de política partidaria. Tienen a la mayoría del personal precarizado y no hay indicios de que van a trabajar en un proceso de normalización del personal. Además, el Municipio ya no paga la Aseguradora de Riesgo de Trabajo (ART) de los empleados, lo que quiere decir que están trabajando sin seguro. No obstante les descuentan en el recibo de sueldo”, dijo Vassel al ser consultado por La República.
Asimismo este diario pudo saber que los despedidos son trabajadores de las áreas de recolección, alumbrado, barrido, espacios verdes y otros sectores que realizan las tareas cotidianas en la calle. Esto argumentaría el motivo de las falencias de la gestión de Gerardo Bassi.
La modalidad que utilizan para despedir al personal es simple. Organizan reuniones en el Partido Justicialista y con el padrón de empleados municipales en mano, toman lista. El que aparece ausente, al día siguiente se encuentra con la novedad de que ya no forma parte de la plantilla de empleados de la Municipalidad de Goya.
Una interna turbia
Esta diáspora está en estricta relación con interna del PJ. Los Bassi, Gerardo y Marcos (padre e hijo), están enfrentados con el senador Rubén Bassi (primo del intendente) y buscan tener el dominio total del PJ Goyano, desterrando al legislador provincial. Por ello la desesperación de la gestión del Profe (el jefe comunal es profesor de educación física) de afiliar a la gente que tienen. En esta pelea, en el medio queda la clase de trabajadores precarizados del Municipio, a quienes los Bassi presionan para que rellenen el formulario de afiliación para mantener su puesto laboral y a su vez llevarse 25 fichas más para afiliar a los familiares y amigos.
Rubén Bassi, en declaraciones radiales, fue duro con sus parientes por la manera en que se están manejando y apuntó directamente a su sobrino Marcos, a quien tachó de analfabeto y barrabrava. “El hijo del intendente es un ‘superministro’. El chico no tiene terminada la secundaria y es el secretario de Hacienda, de Gobierno y el intendente de Goya. Hoy, el que gobierna no es Gerardo Bassi, sino el hijo, al que nosotros no elegimos, cuyo único antecedente es haber sido barrabrava”.
Esta interna de parientes no es nueva. Viene desde que asumió la gestión el Profe, y tras desencuentros con el viceintendente Darío Zapata, renunció al cargo denunciado graves irregularidades. Zapata pertenecía al sector liderado por el senador provincial y fue quien le infringió el primer golpe duro al jefe comunal. Luego balearon la casa del legislador provincial y en la opinión pública quedó instalada la idea que sus parientes le mandaron un mensaje ante los ásperos comentarios que el legislador deslizaba por los medios de prensa provinciales.