Este viernes pasó con puras versiones extraoficiales de lo que podría definirse la semana que viene en cuanto a la cautelar solicitada por los municipios pejotistas sobre la inconstitucionalidad del Decreto Nº 2.034 y la retención de los recursos coparticipables correspondientes al punto extra. Pero también hubo trascendidos de cónclaves convocados por la cúpula judicial correntina, intentando que la sangre no llegue al río, y evitando bajar martillo hacia uno u otro lado.
El día pasó y los representantes del Gobierno aseguraron que de Ricardo dependía, y éste no aflojó. Mientras que los asesores legales de Capital, San Luis del Palmar, Saladas, Tabay y Ramada Paso sostuvieron su confianza en cuanto a que la Justicia dará lugar a la pirámide de Kelsen y dispondrá que un decreto no puede ir por sobre una ley, con el detalle de que en este caso, prima la urgencia, ya que los fondos frenados representan un perjuicio considerable para el correcto funcionamiento de las gestiones municipales.
Luego de varias reuniones informales mantenidas ayer en la Sala de Acuerdos del Superior Tribunal, donde el sector delegado del Gobierno provincial aseveró una y otra vez que esperaba el visto bueno del Nº 1 de la Provincia, desde el PJ expresaron: "Si Ricardo está firme, el justicialismo lo está mucho más, conscientes de que la Justicia, sea la provincial o nacional, dará cabida a nuestros reclamos".

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