La Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió recientemente una advertencia sobre el crecimiento sostenido de casos de covid-19 a nivel global, impulsado principalmente por la nueva variante. A más de cinco años y medio desde el inicio de la pandemia, esta cepa, detectada por primera vez también en China, ya está presente en al menos 22 países, se caracteriza por ser más contagiosa que las anteriores, aunque con síntomas más leves en la mayoría de los casos.

"La nueva variante NB.1.8.1 es más transmisible, pero no parece provocar cuadros más graves", aseguró ayer la médica infectóloga Marta Cohen, en diálogo con la radio Dos. Según detalló, los síntomas predominantes incluyen tos, dolor de garganta, fiebre y fatiga, y no se ha observado un aumento en las internaciones en terapia intensiva ni en la mortalidad asociada.

Remarcó que, sin embargo, esto no implica que la situación sea benigna: "Hay dos picos de circulación del virus cada año, uno en otoño y otro en invierno.

Y la gente se vacuna cada vez menos". Esta falta de inmunización preocupa especialmente a los profesionales de la salud, dado que la covid-19 sigue representando un riesgo importante para personas mayores de 60 años y pacientes con comorbilidades.

En Estados Unidos, por ejemplo, solo el 23% de la población se aplicó la vacuna de refuerzo más reciente.

"Recomiendo fuertemente que las personas con factores de riesgo se vacunen. El virus puede aumentar el riesgo de infarto al inflamar los vasos sanguíneos", advirtió la médica.

El informe más reciente de la OMS también confirma un repunte significativo en la tasa de positividad de las pruebas de coronavirus, que alcanzó el 11% a mediados de mayo.

Este valor no se veía desde julio de 2024 y marca un giro en la tendencia descendente que se venía observando desde principios de este año.

En paralelo, la organización destacó que la mayor transmisibilidad podría saturar los sistemas de salud si no se toman medidas preventivas a tiempo.

La médica también criticó la reciente decisión de Argentina de retirarse de la OMS.

"Solo dos países lo han hecho: Argentina y Estados Unidos. Es una decisión grave. La OMS no atenta contra la soberanía nacional. Irse no deja beneficios, pero sí nos expone a enfrentar solos una futura pandemia".

En este contexto, las autoridades sanitarias internacionales insisten con la necesidad de sostener la vigilancia epidemiológica y aumentar la cobertura de vacunación, especialmente en los grupos más vulnerables. La prevención sigue siendo clave para evitar nuevos sobresaltos.s

Fuente: www.nortecorrientes.com