Por Gabriela Pepe

La guerra que Javier Milei libra contra Mauricio Macri no tiene tregua. Mientras el exmandatario inicia su retiro en el sur del país, pensando en sacarle lustre a la marca PRO para las elecciones 2025, el Presidente respaldó a Cristian Ritondo, denunciado por presuntas irregularidades en su patrimonio. El objetivo es evidente: cobijar al diputado amarillo y robarle un dirigente importante al exmandatario.

“Está siendo víctima de operaciones y persecuciones, justamente por ayudarnos y colaborar”, dijo Milei este jueves sobre Ritondo. El dirigente macrista fue denunciado por presunto lavado de dinero y enriquecimiento ilícito, entre otros delitos, a partir de una investigación periodística que reveló su conexión con propiedades y sociedades offshore por 2,6 millones de dólares en el exterior.

La defensa del Presidente fue llamativa. Ritondo guarda silencio público desde que se reveló la investigación, que publicaron en simultáneo periodistas del Centro Latinoamericano de Investigación Periodística (CLIP), el 8 de diciembre. Macri aún no habló. Institucionalmente, el PRO tampoco dijo nada. El diputado pegó el faltazo a la cumbre partidaria que se celebró el viernes pasado, en el Hotel Abasto. Tenía reservado un lugar cerca de Macri: prefirieron que no fuera.

Ese mediodía, María Eugenia Vidal, respondió a las preguntas de la prensa. Dijo que solo había “una denuncia” y que el PRO iba a hacer “como siempre ante cada denuncia judicial”, presentarse y “dar explicaciones” ante la Justicia. Nadie defendió a Ritondo en público. El diputado participó el jueves de un brindis de fin de año del bloque PRO en el Palacio San Miguel. Agradeció el apoyo de todos, pero no explicó nada.

La defensa de Javier Milei

Este jueves, el Presidente salió a defenderlo desde Tucumán. En el macrismo sacaron una conclusión obvia. “Milei no quiere hacer un acuerdo con el partido para las elecciones del año que viene, se quiere llevar a algunos dirigentes”, dice un diputado del espacio. No está claro si el mandatario busca llevarse a Ritondo o también exponer a Macri, vaciarlo de poder y golpearlo donde más le duele. El diputado es un hombre de máxima confianza del expresidente, le responde directamente. Milei mantiene un diálogo casi cotidiano con el jefe del bloque PRO en la cámara baja, que fue la llave para destrabar todos los problemas del oficialismo en ese recinto.

¿Vuelve la marca PRO?

“Ni rompimos ni estamos aliados. Estamos en un stand by”, se dijo en una reunión que la mesa del PRO bonaerense tuvo el miércoles vía Zoom. Una señal de que, pese a la tensión, en el macrismo todavía hay dirigentes que no descartan por completo un acuerdo con La Libertad Avanza para las listas de 2025.

Para Macri, sin embargo, la posibilidad es cada vez más remota. El expresidente marcó total distancia durante la cumbre de fin de año del PRO, cuando se quejó del “destrato casi permanente del Gobierno” hacia su espacio. “Que alguien me diga, en la historia argentina, cuándo un partido de la oposición hizo tanto por el oficialismo como hizo el PRO este año”, dijo.

Después, el exmandatario viajó hacia Villa La Angostura, donde se instala cada verano. Desde allí se dedicará a definir la estrategia de su espacio, distrito por distrito. Ya hay algunos indicios: Macri ya anunció que el PRO tendrá “una buena propuesta electoral el año que viene”, con representación federal.

Sin acuerdo con los libertarios, Macri apuesta a rescatar la “identidad” de su partido, que el expresidente asocia con gestión, transformación, “profesionalismo y métodos”. “El PRO vino a la política para promover un cambio profundo, pero también un fortalecimiento de la República. Siempre hablamos de gestión, equipo y república”, dijo en aquel acto.

Por eso, la mesa chica de Macri piensa en la posibilidad de que, en 2025, el espacio compita con una lista propia que lleve directamente la marca PRO y pueda representar al macrismo puro. Sello amarillo original.

La decisión será posible por la desintegración, a nivel nacional, de la alianza Juntos por el Cambio. La sociedad con el radicalismo y la Coalición Cívica sobrevive en algunos distritos, como Santa Fe, pero dentro de sellos provinciales. Hay versiones que indican que el expresidente podría ser candidato a senador por la Ciudad. Dicen que mide 42 puntos.

¿Hay espacio para una vía macrista o Milei se quedó con todos los votos PRO? En el partido que conduce el exmandatario dicen que su electorado acompaña el rumbo económico del Gobierno, pero mira con cierta preocupación algunas cuestiones institucionales. Se trata de las llamadas “demandas de lujo” que aparecen una vez que la sociedad entiende que se resolvieron los problemas importantes, como la inflación.

El PRO sigue de cerca ese dato. El año pasado, la inflación aparecía en todas las encuestas al tope de las preocupaciones de la sociedad. Sin embargo, la mayoría de los consultores coincide en que esa preocupación se desinfló, el ritmo de la baja del índice.

Según el último sondeo de Casa Tres, la consultora que dirige Mora Jozami – que forma parte de la Fundación Pensar -, la inflación pasó del 27% de las menciones, en enero, a solo el 6%. Eso representa un triunfo de Milei, pero también implica un desafío. Si la sociedad percibe que es un problema resuelto, abrirá paso a otras demandas.

Fuente: www.letrap.com.ar