Axel Kicillof se realizó esta mañana el test para saber si fue contagiado de coronavirus. Los resultados se aguardan para las próximas horas y desde Gobernación aseguran que darán a conocer el estudio de manera oficial.

La polémica se desató el miércoles cuando se detectaron 15 casos de profesionales médicos infectados con covid-19 en un hospital de San Martín que el Gobernador había visitado pocos días antes.

Hasta esta mañana, desde el entorno de Kicillof no confirmaban la posibilidad de realizar el hisopado sobre el mandatario porque no presentaba síntomas y porque no había mantenido contacto con las personas infectadas. Sin embargo, pasado el mediodía se informó que se había avanzado en el estudio tanto por recomendación de su cuerpo médico como por la responsabilidad social que implica su cargo.

"Si bien el Gobernador no mantuvo contacto estrecho con casos confirmados, ni presenta ningún síntoma, se decidió la realización de dicho test para llevar tranquilidad a los bonarerenses", indicó el gobierno en un comunicado. El resultado -según fuentes del gobierno provincial- se podría conocer a última hora de este jueves.

En el comunicado calificaron de "irresponsables" a las especulaciones alrededor de la visita de Kicillof al hospital provincial Manuel Belgrano de San Martín. Pero lo cierto es que el episodio deja expuesto el riesgo al que se somete la primera línea del gobierno durante las recorridas por distintos puntos del Conurbano y la Ciudad de Buenos Aires, la zona donde más casos se registran.

Tras difundirse el caso, Kicillof tuvo que suspender una reunión pautada con Alberto Fernández y otros gobernadores. De algún modo fue un reconocimiento de la gravedad de la situación. Incluso, trascendió que varios gobernadores se bajaron de ese encuentro en Olivos cuando dimensionaron el caso.

En las fotos de la recorrida del viernes por San Martín, se puede ver al Gobernador y sus ministros sin materiales sanitarios de protección, una escena que se repitió este miércoles durante un acto de Gendarmería en La Matanza que compartió con el presidente Alberto Fernández y la vicegobernadora Verónica Magario. También estuvo la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, y el intendente Fernando Espinoza.

Desde el gobierno bonaerense explicaron que en su visita a San Martín, Kicillof no ingresó en ningún momento al hospital y que la recorrida se realizó en una obra de ampliación lindante a ese establecimiento.

El episodio -más allá de un eventual resultado negativo- pone en discusión el nivel de exposición pública con que se maneja la dirigencia argentina. Tanto el Presidente como el Gobernador y el jefe de Gobierno porteño, ministros e intendentes, mantienen un reflejo de la política tradicional que los hace visitar obras y encabezar actos, actividades absolutamente prescindibles en el actual contexto.

Las visitas a hospitales se suceden casi a diario, justo en momentos en que se multiplican los casos de profesionales de la salud que contraen el virus. Se trata a nivel global, de los lugares más riesgosos, como reconoció el propio ministro de Salud, Ginés González García.

El miércoles Kicillof luego de estar en La Matanza con el Presidente, Kicillof se trasladó a Vicente López y San Isidro para visitar los comité de emergencias. Se trata de los tres distritos con mayor cantidad de casos. Según un relevamiento que publicó hoy La Nación (la provincia no difunde números de distritos), Vicente López tiene 37 casos, La Matanza tenía 35 y San Isidro 33.

Tanto Alberto, como Kicillof y los intendentes se mueven rodeados de asesores, fotógrafos y periodistas, que recorren hospitales y municipios donde comparten actividades con dirigentes y profesionales de otros lugares.

Otro episodio similar ocurrió la semana pasada cuando el Presidente viajó a La Plata para presentar en el Salón Dorado de la Gobernación bonaerense Cuenta DNI, una billetera digital gratuita que permite realizar operaciones desde el celular.

En Argentina, las bajas cifras hicieron que todavía no se registren casos de contagio en la primera línea del gobierno, pero la experiencia internacional indica que los políticos de primera línea están muy expuestos si no toman los recaudos mínimos.

En otros países hubo casos que sirven de ejemplos. En España, Irene Montero, la ‘número dos' de Podemos lleva ya más de un mes en cuarentena, ya que fue el pasado 11 de marzo, antes de que se decretara el estado de alarma en ese país, cuando dio positivo por primera vez en las pruebas que se hizo tras notar síntomas del virus, luego de encabezar la multitudinaria marcha de las mujeres del 8M, considerada uno de los vectores que dispararon los casos en la capital española.

Lo mismo sucedió con la presidenta de la comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que dio positivo el 16 de Marzo y desde entonces hasta el viernes 10 de abril, permaneció aislada en un apart hotel.

En Canadá, Justin Trudeau estuvo dos semanas aislado luego de que se confirmara que su esposa se había contagiado en una visita al Reino Unido. Aunque el primer ministro nunca presentó síntomas, la decisión del gobierno fue que Trudeau trabajara vía teletrabajo en su residencia, a unos kilómetros de su oficina oficial y del parlamento. Un confinamiento preventivo que acaso le indiquen al gobernador.

Fuente:www.lapoliticaonline.com