NACIONALES
28 de febrero de 2019
Economistas advierten que Argentina afronta la peor recesión desde 2009
Ayer se conoció que la actividad económica del año pasado cayó un 2,6%. Sequía y tarifas, las principales causas de la situación.
La Argentina enfrenta la peor recesión desde el 2009, tras conocerse la caída del 2,6% en la actividad económica el año pasado, según un estudio privado difundido ayer. La sequía, los aumentos tarifarios y la devaluación fueron las principales causas del retroceso económico, según un informe de la consultora Ecolatina. A comienzos de 2018, el consenso de mercado elaborado por el Bcra proyectaba un crecimiento cercano al 3%: se esperaba romper la maldición de los años pares gracias a un buen inicio del año y al elevado arrastre estadístico positivo que dejaba 2017, pero la sequía, la corrida cambiaria y la aceleración de la inflación derrumbaron las expectativas, indicó el informe. En el segundo trimestre se sintió el impacto pleno de la sequía (el sector agropecuario cayó más de 30%) y los primeros cimbronazos del mercado cambiario (hubo una depreciación del Peso cercana al 30% en el período). A ello se sumaron aumentos tarifarios que terminaron por acelerar la inflación aún más (acumuló 16% en el primer semestre, ya por encima de la meta establecida por el Gobierno para la totalidad del año). Esto implicó un nuevo golpe al poder adquisitivo (en pesos y dólares) y retrajo el ya alicaído consumo de las familias. Hacia fines de agosto la inestabilidad cambiaria volvió a escena y el dólar pegó un salto de casi 33% en pocos días. Esta dinámica y la incertidumbre sobre el rumbo económico impactaron significativamente en la actividad económica y, a través de una creciente e inesperada inflación, sobre el poder adquisitivo de la población. Además, derivó en un segundo acuerdo con el FMI que implicó una aceleración en el recorte del gasto público y la adopción de un esquema de metas de agregados monetarios (emisión cuasi-nula) y bandas cambiarias para estabilizar el frente externo. El costo de este esquema, que rápidamente llevó la tasa de interés a niveles muy elevados, fue un enfriamiento de la actividad que implicó una caída de 6,3% en el último trimestre del año. s
Fuente:www.nortecorrientes.com