Fue Alvar Sánchez Guerrero quien picó en punta, noches atrás, cuando lanzó su postulación en un acto público que congregó a una importante cantidad de dirigentes barriales, ávidos de recrear la militancia a la vieja usanza justicialista.
El actual Presidente del Colegio de Abogados y del Consejo Superior de Colegios de Abogados de la Provincia, alcanzó notoriedad en las últimas semanas, por la encendida defensa de las instituciones, frente al avance de la cúpula tribunalicia correntina, que amenazó con sancionar a tres camaristas libreños que pusieron límites a los desbordes de la conducción provincial de la Justicia.
Sánchez Guerrero, quien es a la vez, representante del Estado Nacional como delegado de la Procuración General del Tesoro en Paso de los Libres, llegó días atrás al despacho de la senadora Meabe, a la espera de una convocatoria del secretario de Justicia de la Nación, Julián Álvarez, interesado en profundizar en las líneas de acción a seguir con el Poder Judicial de Corrientes.
Esta actividad de Sánchez Guerrero no lo alejó de la práctica militante en el peronismo libreño, siendo desde hace tiempo claro que aspira a suceder a Peteco Vischi, para lo cual dió un paso decisivo, al blanquear sus aspiraciones con la apertura de la sede partidaria con vistas a las internas del 17 de marzo venidero.
En este marco, tanto Sánchez Guerrero como Valdovinos y Jouliá, son tres de los dirigentes que han marcado claramente a la dirigencia provincial que las encuestas sólo serán aceptadas como materia de análisis para las decisiones, sin que sean determinantes de los consensos que podrían o no alcanzarse.
Una de las cuestiones que genera controversias entre los libreños y la conducción provincial, pasa por el hecho de que hay dudas respecto a la posibilidad de que una misma lista local juegue en las distintas provinciales. Hasta ahora no hay acuerdo en la cúspide, y aunque se buscan consensos respecto a las reglas de juego, el temor pasa siempre por la posible judicialización de aspectos que a la hora de la unificación partidaria mediante internas, son fundamentales.
El reclamo en este aspecto, es extendido a otras localidades que ven perjudicadas con estas reglas de juego la posibilidad de facilitar los triunfos en las elecciones generales, en cuanto a que la dispersión a la que contribuye el estatuto partidario conspira contra la posibilidad de amplios consensos.
En ese contexto, desde el interior se señala que con este sistema se quita peso y representación a la dirigencia territorial, a la hora de reclamar espacios provinciales en las listas legislativas.
La visita en las últimas semanas, primero de Rodolfo Martínez Llano y luego de Fabián Ríos, mostraron las diferencias de criterio aún irresueltas, que subsisten en el marco de la política provincial del justicialismo, las cuales a la hora de emprolijar el proceso electoral interno, serán fundamentales.
Lo que se dejó trascender desde la línea opositora Vamos Compañeros, es que si bien se apostará a solucionar por la vía del consenso todas las modalidades de la contienda, a la hora de las garantías se requerirán idénticas medidas que las adoptadas por la Justicia electoral en el proceso electoral de los años 90, para garantizar la transparencia de los comicios y la legitimidad de los resultados que permitan la unificación del justicialismo a través del sistema D'Hont.