28 de septiembre de 2015
El 45% de los correntinos está en negro y la mitad del trabajo en blanco es público
Un informe de una consultora privada estimó que en la provincia sólo hay 9 empresas cada 1000 habitantes que generan trabajo genuino. La situación es similar en casi todas las provincias del norte del país y se habla de “exceso de empleados públicos”.
por Pablo Miguel Reyes Beyer
Según un estudio privado, en Corrientes el empleo estatal representa cerca de la mitad de los trabajadores que están en blanco. Además, se detalla que la informalidad laboral tiene un impacto del 45% en el mercado provincial.
En materia del impacto empleo estatal entre los trabajadores efectivos, Corrientes es superado sólo por Catamarca y Formosa. La provincia está al mismo nivel que Chaco, La Rioja y Santiago del Estero.
Mientras que en trabajo en negro a nivel nacional Corrientes está en el puesto 20º, por debajo sólo de Santiago del Estero, Salta, Tucumán y Chaco, la peor del país con un 56%.
Se trata de un estudio de la consultora Naonomics, donde analizan las economías provinciales y la situación laboral del país. Allí advierten que si bien la informalidad afecta a la mayoría de las provincias, “suele hacerlo con más intensidad en donde el empleo público adquiere más protagonismo”.
Además Corrientes está entre las diez provincias que menos empresas generadoras de trabajo genuino tiene en relación con su población, ya que hay 9 cada 1000 habitantes, mismo número que Misiones, Chaco y Tucumán. En Catamarca y Salta hay 8, en La Rioja, Jujuy y Santiago del Estero 7 y Formosa está última con 5.
Estos números desnudan las complicaciones que sufre el llamado norte grande del país (regiones NEA y NOA) a la hora de generar empleo formal. En las 10 provincias de la zona al menos 4 de cada 10 empleados en blanco son públicos (salvo Misiones y Tucumán) y los porcentajes de trabajo en negro son iguales o superiores a la media nacional del 36% que se verificaba en 2014 según el Indec (salvo por Catamarca).
Por otra parte, la investigación dicta que “existe un nivel muy importante de “sobrante” de empleo público en la mayoría de las provincias con lo que profundizarlo es sumamente riesgoso económicamente”. Aseguran que a 2014 habría un 30% de exceso en la dotación de empleados públicos provinciales de las 24 jurisdicciones del país.
El informe además resulta crítico contra la Administración Nacional ya que asegura que “el federalismo fiscal actualmente se encuentra en su mínima expresión, con cada vez menor participación de la masa coparticipable como porcentaje de la recaudación total, 24%, y por ende mayor peso relativo de las transferencias discrecionales, esta dependencia además de ser financiera pasa a ser política”. Además agregan que “en definitiva tanto desde el punto económico como político existen provincias más libres que otras”.
La fuente en que se basa la consultora Noanomics son la Encuesta Anual de Hogares Urbanos del INDEC, el Ministerio de Trabajo y administraciones provinciales a 2014, el último período disponible.
Revertir el panorama
Para Noanomics, Corrientes es una de las provincias donde para mejorar el panorama tanto el empleo en negro, como el “exceso” de empleados estatales, se necesitaría más que duplicar las empresas que generen trabajo. Concretamente en la provincia tiene que crecer en un 123% las firmas privadas, un 100% para reducir a la mitad la informalidad laboral, y un 23% para licuar el sobrante de trabajadores provinciales, ubicándose tercero en el ranking.
Corrientes es superado sólo Santiago del Estero, que necesitaría un crecimiento del 131% en su cantidad de empresas formales (105% para bajar el trabajo en negro a la mitad y 26% para incorporar el "exceso" de empleo público) y Chaco con 129% (106%y 23%). Después están Catamarca, Salta, Formosa, Tucumán, Jujuy y La Rioja.
En el extremo superior la Ciudad de Buenos Aires es el distrito con mayor cantidad de empresas privadas formales por cada mil habitantes, 46, y en el que menor cantidad de empleados públicos por cada 10 empleos en blanco se registra, sólo 1, situándose además entre las cuatro jurisdicciones con menos trabajo en negro (22%).
Por último, según la consultora, se llegó al punto “en el que los gobiernos provinciales no pueden seguir utilizando la expansión del empleo público como herramienta de política económica, al menos sin poner en serio peligro su situación fiscal”. Se advierte también que el nivel de empleo informal “no ha podido reducirse en los últimos cuatro años” y aseguran que “el problema no se soluciona con más Estado sino con mayor actividad privada”.
Fuente:www.ellitoral.com.ar