Gustavo Valdés no convence a Karina Milei y por ahora no hay alianza entre la UCR y LLA en Corrientes

Por César Pucheta
Después de acomodar la estructura que definirá la estrategia de la UCR en Corrientes, Gustavo Valdés pasó el lunes por la Casa Rosada y visitó a Karina Milei. “Queremos ampliar nuestro espacio político", dijo apenas salió del despacho de la secretaria general de la Presidencia alimentando las suspicacias que pone en el horizonte el debate por su sucesión.
Según pudo saber Letra P, la reunión estaba pautada con anterioridad. No se actualizó la foto que circuló por redes sociales, que el correntino aclaró que era “de archivo”, pero sí algunas discusiones. Entre ellas, la electoral, que no llevó una gran cantidad de tiempo, aunque sí dejó algunas definiciones.
Valdés se guarda en la manga la fecha de las elecciones provinciales, en la que se renovarán casi todos los cargos ejecutivos y legislativos de Corrientes. La responsable del armado nacional libertario quiso saber qué cronograma tiene en mente. Sobre todo teniendo en cuenta que la provincia también elegirá en octubre tres bancas en la Cámara de Diputados.
“Estamos conversando con La Libertad Avanza como posibilidad de seguir cumpliendo con todos los sectores que quieran anteponer y trabajar para que la provincia de Corrientes siga creciendo”, dijo Valdés en una entrevista con Radio Sudamericana luego de la reunión a la que asistió junto a su grupo de asesores más cercano.
En la Casa Rosada le bajan el precio a esas intenciones. “No hay acuerdo, al menos por ahora”, aseguraron.
La estrategia de Karina Milei no se mancha
Letra P ya había contado las intenciones del gobernador de sumar a los sectores libertarios al armado de Vamos Corrientes. Esas conversaciones, que existen con algunas patas del mileísmo provincial, no parecen encontrar eco en las usinas nacionales de La Libertad Avanza.
Los rumores se acrecentaron luego del pacto sellado por la Casa Rosada con Leandro Zdero, quizás el gobernador más cercano a Valdés, que sumará a los libertarios al armado del oficialismo chaqueño tanto para las elecciones provinciales del 11 de mayo como para las nacionales del 26 de octubre.
Claro que la situación de Corrientes es distinta. La excusa de un enemigo peronista al acecho, que en la narrativa chaqueña corporiza el regreso de Jorge Capitanich, está lejos de aparecer en la escena provincial, donde el radicalismo gobierna ininterrumpidamente desde hace 25 años.
A diferencia de Chaco, en la provincia que estará bajo el mando de Valdés hasta el 10 de diciembre también se multiplican los aspirantes libertarios. Muchos con ascendencia marcada sobre los referentes nacionales. El caso más palpable es el del diputado Lisandro Almirón, posiblemente el nombre de Karina Milei y Martín Menem para dar la batalla por la primera gobernación libertaria.
En algún momento, Camau Espínola también intentó contar con el beneplácito nacional para estructurar un frente que pueda ostentar el apoyo del Presidente, uno de los dirigentes con mejor imagen en la provincia. Esas intenciones quedan en stand by luego del lanzamiento del espacio que lo unió junto a otros tres precandidatos a la gobernación que este medio dio a conocer la semana pasada.
Qué dijo Gustavo Valdés sobre el encuentro
El gobernador reconoció que hubo una conversación “política” pero, como habitualmente lo hace, prefirió poner el foco en la gestión. “Hablamos de cuestiones productivas, industriales, temas que tienen que ver con lo forestal, el puerto, las inversiones eléctricas, con Yacyretá”, enumeró Valdés, que también destacó el trabajo conjunto que la provincia viene desarrollando a partir de la articulación con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y otras carteras nacionales.
"Queremos seguir en este ritmo”, destacó el radical. Al analizar el plano electoral, dijo que “si no se da” el acuerdo electoral, seguirá trabajando "cada uno desde su espacio, siempre por Corrientes y por el país”. “Me parece auspicioso que podamos tener un rumbo común de crecimiento”, afirmó.
Entusiasmado, Valdés habló de “las primeras conversaciones” en las que aseguró que hubo coincidencias en términos de gestión. “Ojalá podamos tener un entendimiento político, que podamos incorporar un sector nuevo y después de las elecciones provinciales que podamos pensar en una elección nacional, por qué no”, lanzó.
El radicalismo activó la estructura en Corrientes
Luego de un proceso conflictivo que marcó el pulso a lo largo de todo 2024, la Convención de la UCR de Corrientes terminó de ordenar su estructura el fin de semana. Valdés había sido elegido presidente del Comité Central a finales del año pasado y Henry Fick revalidó su cargo en la presidencia de la Convención el sábado.
Más allá de los nombres, Valdés cosechó su siembra e impuso una condición que ya tuvo su comprobada efectividad en 2021, cuando fue reelecto con casi el 77% de los votos, convirtiéndose en el gobernador más votado de la historia de la provincia. Según se definió, las estrategias locales no podrán despegarse de la provincial y quienes aspiren a cargos municipales sólo podrán colgarse del candidato a gobernador por la alianza oficialista.
"No va a haber la posibilidad de que haya un candidato a intendente que lleve dos candidatos a gobernadores”, anticipó Valdés en la Convención, en la que reiteró su deseo de seguir ampliando la alianza electoral para la que auguró “la mejor y más fuerte construcción dentro de cada una de las ciudades para poder ganar”.
Esa postura del gobernador, que pone a los intereses de Vamos Corrientes, su sello electoral, por sobre el resto de las estrategias choca de lleno contra los deseos de la pureza y el extensión territorial que se proponen los armadores nacionales de La Libertad Avanza.
Fuente: www.letrap.com.ar