Durante el fin de semana pasado en el barrio Nuevo, más de una decena de familias de la zona usurparon los predios baldíos ubicados sobre la calle Sánchez de Bustamante al 2800 reclamando por viviendas dignas y un lugar propio donde vivir. Los usurpadores manifestaron que los terrenos se encuentran abandonados desde hace varias décadas y que ante la necesidad, decidieron tomar la zona comprendida de un par de manzanas.
En el lugar los usurpadores limpiaron el predio y delimitaron las parcelas de cada familia y levantaron precarias casillas y carpas. Además, con el correr de los días se fueron sumando más okupas para ingresar a la zona baldía.
Desde el fin de semana pasado, varios grupos familiares usurparon los terrenos ubicados en el barrio Nuevo sobre la calle Sánchez de Bustamante al 2800, más precisamente entre las calles 192 y Vespucio. Se trata de un predio de varias manzanas que se encontraba sin uso y que los okupas señalaron que no se usaba desde hace aproximadamente tres décadas, por lo que decidieron ingresar en reclamo de mejoras habitacionales, viviendas y predios propios.
En un principio ingresaron pocas familias, pero hasta ayer se contabilizaron unos 15 grupos familiares, aunque la cifra podría ampliarse. En el lugar, los okupas limpiaron con machetes e inclusive con bordeadoras las malezas y posteriormente delimitaron las parcelas para cada miembro del asentamiento; posteriormente erigieron casillas precarias con chapas, cartones o carpas con lonas y palos para quedarse en el lugar.
Según manifestaron los okupas, están dispuestos a negociar con los propietarios de los terrenos baldíos para obtenerlos, ya que no son utilizados desde hace años. “Necesitamos un lugar donde vivir y tomar este terreno abandonado es nuestra única alternativa”, expresaron los usurpadores.
Se trata de familias que habitan en la zona pero que reclaman mejores condiciones de vida y viviendas propias en el lugar ante la necesidad y la cantidad de integrantes con los que cuenta cada grupo.
Hasta ayer en el baldío se ubicaron unas 80 personas, pero se estimaba que podría continuar aumentando la cantidad de ocupantes con el correr de los días y a la espera del contacto con algún propietario.
En la zona Sur de la ciudad, más precisamente en los barrios Pirayuí y 17 de Agosto, en los últimos años se registraron distintos asentamientos ilegales y tomas de terrenos baldíos por parte de grupos familiares que reclamaron viviendas dignas y lugares donde vivir. En la mayoría de los casos se trató de usurpaciones llevadas a cabo por habitantes de las inmediaciones de los terrenos.