Luego de varios días de descenso el río Paraná salió del nivel de evacuación pero se mantiene estacionado cerca de los 7 metros, lo cual impide el regreso de los evacuados a sus hogares e incrementa la ansiedad de los afectados ante la incertidumbre del futuro cercano. Mientras que en el barrio Itatí hace dos meses se encuentran siendo asistidos, en la zona del Caridi los afectados señalaron que no saben cuándo podrán volver a sus casas debido al estado en el que se encuentran y solicitan una solución definitiva por parte del Estado para no volver a sufrir anegamientos.
En las zonas de Caridi como en otras partes de la ciudad tanto la Municipalidad como el Gobierno de la Provincia se encuentran brindando asistencia a los evacuados. En la Capital hay unas 73 familias damnificadas, entre evacuados y autoevacuados, distruibuidos en las barriadas de  Quinta Ferré, Sol de Mayo, Anahí, Cichero, Río Paraná, Punta Taitalo, Molina Punta, Astilleros y la Tosquera entre otros.
En el barrio Itatí hay unas 8 familias que desde hace dos meses sufren las consecuencias de la creciente del río Paraná y deben ser asistidas. “Hace dos meses que estamos viviendo en la Capilla y ya no vemos la hora de volver a nuestras casas. Todos los días vamos y miramos pero hay agua adentro, por lo que es imposible”, señaló a El Litoral una de las encargadas del lugar. “Tampoco tenemos fecha en la que podamos regresar; no nos queda otra opción que esperar”, añadió la joven mujer.
Si bien el Paraná registró una bajante, las familias del barrio Itatí no pueden regresar a sus casas y la ansiedad juega un papel preponderante. “Todos los días mi papá se queda en la casa por miedo a que nos roben las pocas cosas que nos quedaron y que están bajo el agua”, añadió.
En el otro extremo de la ciudad, más precisamente sobre la costanera Sur, hay unas 18 familias de la zona del Caridi que todavía se encuentran evacuadas en la escuela N°299 y que no pueden regresar a sus casas debido a la altura del río y al estado en el que se encuentran sus precarias viviendas. “El río bajó pero no podemos volver a nuestras casas porque todavía hay agua podrida adentro, muchos bichos y es peligroso para estar con los niños. Vamos a quedarnos acá y seguiremos yendo a ver nuestros hogares y a cuidar de que no nos roben nada”, expresó Karina, una de las evacuadas de la escuela N°299.
Asimismo, los afectados solicitarán una solución definitiva para irse. “Queremos que nos den alguna casilla o terrenos más altos para comprar porque siempre nos pasa esto y no podemos volver a ese lugar”, expresó Antonio, quien está junto a su esposa y sus dos hijos en el colegio del barrio Galván.
Otro de los miedos de los evacuados son las condiciones climáticas, ya que con las lluvias empeora su situación y se aleja aún más la fecha de retorno a sus casas. Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) pronosticó que hoy se registrarían lluvias y tormentas para la ciudad, por lo que las familias afectadas se encuentran en alerta nuevamente, ya que durante las precipitaciones de fines del 2015 sufrieron graves inconvenientes y perdidas a las ya conocidas consecuencias de la creciente.

El dato

El río Paraná se mantiene estacionado en 6,96 metros estando fuera del nivel de evacuación. En los últimos días registró considerables bajantes.

Fuente:www.ellitoral.com.ar