Tras haber entrado en el segundo semestre del calendario escolar, desde las vacaciones de invierno la Dirección de Infraestructura Escolar trabaja contrarreloj para solucionar los problemas edilicios de los colegios, producto de accidentes o actos de vandalismo. 
Tan es así que a partir de hoy comenzarán a funcionar algunos de los establecimientos que contaban con falencias edilicias, como el Colegio N° 7 “Isabel E. Vera” y uno de los salones del Colegio Secundario Fernando Piragine Niveyro.
Además, desde la semana pasada empezaron a dictar clases en el Colegio Brigadier General Pedro Ferré, aunque en horarios reducidos porque las obras todavía continúan en la institución.

Escuela Nº 7
El Colegio Isabel Vera tuvo un retraso en su comienzo de clases tras las vacaciones de invierno por obras de refacción en el establecimiento. 
Los trabajos consistieron en cambios de pisos, renovación de instalaciones eléctricas, de ventilación, aberturas nuevas, construcción y modificación de los baños, nuevas salas de bibliotecas y sector de odontología.
De esa forma, Infraestructura Escolar aseguró que culminaron con las obras y desde hoy empezarán con las clases.

Piragine Niveyro
El Gobierno había empezado con trabajos en el Colegio Piragine luego de que el edificio haya sufrido un incendio intencional que afectó severamente a dos salones, hace aproximadamente unos cuatro meses.
Las autoridades del establecimiento esperan que para esta semana sea habilitada una de las aulas. Se trata de la sala contigua a la que se inició el fuego, que ya se encuentra casi terminada.
El mayor inconveniente de esta escuela es que los salones dañados se encuentran en la mitad del edificio, dividiendo la escuela en dos mitades, y complicando las actividades y la comunicación.

Colegio Ferré
Por su parte, el Colegio Brigadier General Pedro Ferré va recuperando su infraestructura tras padecer un incendio provocado por un cortocircuito en uno de los salones.
Luego de cuatro semanas de trabajo los alumnos pudieron volver a dictar clases, pero en horarios reducidos y en el polideportivo. Es que a pesar de aprovechar el receso invernal, las obras se retrasaron y los estudiantes y profesores debieron esperar más tiempo que el resto de los establecimientos.