24 de abril de 2015
Violencia escolar: un nuevo caso denunciado evidencia falencias en prevención y asistencia
La mamá de un chico de diez años relató que su hijo toma antidepresivos y tiene miedo de morirse en la escuela después de un ataque. Es el segundo caso que se presenta en la provincia en el año y desde un organismo estatal sostienen que las autoridades de los colegios deben tomar medidas.
En la jornada de ayer un tutor denunció un nuevo caso de violencia escolar en un colegio de la provincia, en esta oportunidad el hecho ocurrió en la Escuela N°606 “Provincia de Buenos Aires”. Alumnos de 6° año habrían “ahorcado” a un niño un año menor que ellos a principios del año lectivo y después de varios indicios, que la madre pudo detectar y trabajar con psicólogos, la víctima contó lo que ocurrió durante un recreo.
“Él empezó bien la escuela, a las dos semanas tuvo un problema. Después de eso lloraba todo el día pero nunca decía porque, se enfermaba y los estudios que le hacía indicaban que todo estaba bien. Cuando lloraba mucho le trataba de sacar lo que le pasaba pero no decía nada, le pedí ayuda a una sobrina y también con tratamiento psicológico pudimos saber qué pasó. Contó que son chicos que jugaban con él en el verano, durante un recreo le cruzaron los brazos y lo apretaron fuerte hasta ahorcarlo y mi hijo sintió que no podía respirar. Tenía miedo de morirse, eso contó en casa de sus tíos, tenía temor de morirse en la escuela”, relató a El Litoral Lorena Ibarra, mamá del niño agredido.
La tutora comentó que el alumno de 5° dejó de comer en la escuela donde almorzaba y que no le dio más información sobre el hecho. “No sé si fue en una pelea, como broma o cuál puede ser el motivo, sólo sé que él ya no es el mismo de antes, cambió mucho”, dijo la mujer.
“Sigue yendo a la escuela porque no quiero que tenga faltas, no deseo que repita. Voy a los recreos a controlar que todo esté bien, ya no es el mismo, está tomando antidepresivos y tiene sólo 10 años”, comentó Lorena y agregó que pensó en cambiarlo de colegio pero, es la institución más cercana a su casa y que lo lleva y trae de clases, no lo deja solo.
Respecto a la postura de la directora indicó que “pensaba que el problema estaba en mi casa”. “Llegaba a la escuela y se ponía pálido, me dio el nombre de los chicos que lo agredieron y ellos negaron todo, desde la escuela ni siquiera le avisaron a los padres; no hicieron nada sólo dijeron que iban a controlar más”, sostuvo.
Las autoridades de la cartera educativa no se comunicaron con ella. En relación a ello, indicó que está esperando el informe de la psicóloga para ir a hablar con la supervisora y con los padres de los chicos que lo agredieron.
“Dicen que a los chicos no los pueden suspender, que no le pueden sacar sus derechos. Estoy esperando el informe para poder actuar, mi hijo desde los 4 años va a esa escuela y nunca tuvo un problema parecido, ahora lo tengo que llevar y controlar en los recreos”, dijo la mujer.
Por otra parte, ante la agresión por parte de compañeras a una alumna de 14 años a la salida de la Escuela Profesional Valentín Virasoro (Goya) hace dos semanas, la titular de la Dirección de Servicios Educativos de Prevención y Apoyo (Disepa) Julia Sáez, dijo a El Litoral que las instituciones tienen “acuerdos de convivencias” y que son ellas las que deben tratar de resolver el caso; desde Educación brindan acompañamiento, sólo en el caso de que no resuelvan el conflicto actúa la cartera educativa.
Fuente:www.ellitoral.com.ar
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