El prosecretario del Consejo de la Magistratura, Javier Vigliano informó el pasado martes 3 al titular de la Cámara de Senadores, Gustavo Canteros, que se formuló la acusación contra la fiscal de Instrucción, Corrección y de Menores Nº 1 de Paso de los Libres, Roxana Beatriz Romero por mal desempeño.
EL LIBERTADOR tuvo acceso a la Nota Nº 2.225 enviada a la Mesa de Entrada de Asuntos Legislativos, en la cual se detalla lo que en el fondo representa una oxigenación para una situación que había puesto en vilo a los distintos actores de la Justicia provincial y al pueblo libreño. Es que se trata de un caso en el que se acusó a la funcionaria judicial Romero de maltrato laboral y abuso de poder, con la muerte de por medio de un integrante de la Fiscalía a su cargo, que habría sufrido un pico de estrés producto de esta anómala coyuntural de trabajo.
Muchas fueron las manifestaciones en Paso de los Libres y en la Capital correntina para que las autoridades del Poder Judicial tomen cartas en un asunto, cuya dilación hizo asomar ciertas dudas subrepticias en cuanto a la posibilidad de que la Fiscal tuviera apoyos dentro del Ministerio Público tendientes a cubrir su lapidaria actualidad.
El propio titular del gremio de los judiciales, Julio Piumato, junto a referentes sindicales de distintos puntos del país, marchó por las calles capitalinas exigiendo el apartamiento de la Fiscal.
Sin embargo, el tiempo pasó y al finalizar la feria se colocó un manto tranquilizador sobre un escenario caldeado. El Consejo de la Magistratura hizo lo suyo y procedió a suspender en el ejercicio de sus funciones a la cuestionada Romero.
La decisión del órgano creado en la reforma constitucional de 2007 tuvo impulso el pasado 19 de diciembre; sin embargo, por la feria judicial y administrativa se informó recién este martes a la Cámara alta sobre la situación de la suspendida Fiscal de Instrucción de Paso de los Libres.
Lo cierto es que de ahora en más comienzan a regir los plazos establecidos por norma para avanzar con el enjuiciamiento, el cual podría terminar en la destitución de quien fue criticada por malos tratos desde sus comienzos como profesora de Instrucción Cívica, en el Instituto Salesiano Pío XI, siguiendo su derrotero en cada juzgado que le tocó trabajar y finalizando con un pueblo libreño decidido a hacerle sentir el peso de la opinión pública, aunque también cada profesional que por distintos motivos rozó su despacho, ya sean policías, peritos, abogados, entre otros profesionales supieron decir lo suyo respecto al accionar de Romero.

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