La localidad de Santo Tomé se mantiene con poco más de diez familias autoevacuadas, mientras el río Uruguay desciende y vuelve a su cauce normal.
Los damnificados son asistidos integralmente por el Municipio y continúa la reparación del puente Bailey, que incomunicó a la ciudad con las comunidades de Garruchos y Garaví.
Si bien el Uruguay no produjo el traslado de familias en otras zonas costeras, las municipalidades de Alvear, La Cruz y Monte Caseros se mantienen alertas ante el comportamiento de su cauce, que desborda en toda la región al menos dos veces por año, generando incontables daños y evacuaciones.

BAJO CONTROL

En diálogo con EL LIBERTADOR, la secretaria de Prensa Mercedes Berón confirmó que más de diez familias procedentes de los barrios Itacuá, Cerro y Piñeral continúan autoevacuadas y asistidas por las distintas áreas municipales.
"El agua sigue bajando lentamente", ilustró la funcionaria sobre la situación hídrica, que no provocó cientos de refugiados como inundaciones anteriores.
Además informó que prosiguen los trabajos de refacción del puente Bailey, sobre el arroyo Virocay, donde el panorama resulta crítico por las importantes fisuras acaecidas en la contención, como relataron desde la Dirección de Vialidad Provincial (DPV) local.
"Un extremo se está rellenado con arena, mientras que el otro sigue cortado", agregó Berón.
Por su parte, el jefe de la DPV Santo Tomé, Orlando Almeida aseguró: "Tenemos que trabajar con la contención y con los pilotes, ahora se va a hacer un trabajo con Sección Puente de Vialidad".
Entre hoy y mañana llegarán los especialistas de Casa Central, con el objetivo de dejar en funcionamiento la vía de comunicación que une a la localidad con Garruchos y Garaví, que desde el jueves 1 se encuentra imposibilitada al tránsito.

GARRUCHOS

La Secretaria de Prensa de Santo Tomé se comunicó con el intendente de Garruchos, José Minigozi, quien le aseguró que, si bien la localidad todavía no sufre grandes problemas viales porque está en receso escolar y académico, las ambulancias y los vehículos que se quieren trasladar hasta allí deben dar toda una vuelta por el paso cortado.