Las autoridades municipales de La Cruz mantuvieron una reunión con representantes del Ministerio de Turismo, en pos de la preservación y puesta en valor del patrimonio jesuítico-guaraní.
El intendente Mateo Maydana, el vice Luis Calomarde y la secretaria de Educación, Cultura y Turismo, Flavia Luján recibieron a la arqueóloga María Belén Zaninovich y al licenciado Jorge Pereyra, que realizan un relevamiento a nivel provincial del aporte de las comunas asentadas en lugares históricos.
La costa del río Uruguay conforma gran parte del corredor turístico Jesuítico-Guaraní, gracias a la rica historia de las localidades integrantes de La Cruz, San Carlos, Gobernador Virasoro, Santo Tomé, Alvear y Yapeyú.

ENCUENTRO

En diálogo con EL LIBERTADOR, el Vicejefe comunal indicó que el Ministerio de Turismo realiza un relevamiento del aporte de los municipios a la recuperación de su patrimonio cultural, con el objetivo a largo plazo de realizar nuevas obras.
"Una vez que se termine el relevamiento, se pensará qué obras son más necesarias y se definirán los recursos provinciales disponibles", comentó Calomarde, recordando que la gestión que encabeza no tendrá inconvenientes en aportar lo que pueda en la memoria cruceña.

RIQUEZA LOCAL

Los representantes provinciales llegaron a La Cruz en busca de lo logrado por el equipo municipal de arqueología, encabezado hasta hace poco tiempo por María Eugenia Turus, hoy residente de Alemania.
Secundados por la comitiva municipal, primero visitaron el antiguo templo jesuítico de la localidad, cuya construcción actual es más pequeña que la original, por lo que en el futuro se baraja la posibilidad de recuperar la estructura completa, así como habilitar un paseo histórico para turistas.
Luego se dirigieron al cementerio del barrio Yaguarí, que en un principio sólo concentraba los restos de pueblos originarios de la zona, pero después se terminó anexando a otros cementerios de la zona.
Los funcionarios analizaron la necesidad de realizar excavaciones en la zona, para recuperar y poner en valor los antiguos elementos que pudieran encontrarse, antes de que las arenas del tiempo terminen de sepultarlos en el olvido.
Calomarde agregó que en los últimos cinco años de gestión, se construyeron dos museos históricos y murales a lo largo de la localidad, y se enfocó en la puesta en valor de utensilios como los centenarios hornos donde se construían tejas y otros materiales.