La producción de las pymes industriales mejoró en julio 19,4 por ciento respecto a junio, informó este domingo la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Respecto a los niveles de doce meses atrás, se ubicó 13,6 por ciento, recuperando posiciones "respecto a meses anteriores, a partir de la reactivación de la mayoría de los rubros del área, luego de aplicar medidas para evitar el contagio de coronavirus", comunicó la entidad empresas. 

El Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) relevado por la entidad se ubicó en julio en 63,4 puntos, un 19,4 por encima del 53,1 de junio. En el cotejo interanual, la caída completa una curva de recuperación: en junio (-25,3 por ciento interanual), mayo (-34,9 por ciento), abril (-53,1 por ciento) y marzo (-28,8 por ciento), cuando comenzaron las medidas de aislamiento obligatorio ante el impacto de la pandemia de la COVID-19.

El uso de la capacidad instalada de la industria pyme subió a 58,3 por ciento, desde el 52,9 por ciento de junio y el 47,4 por ciento de mayo, mientras que solo el 11 por ciento de las firmas espera que la producción continúe bajando en los próximos meses contra le 27 por ciento que espera aumentos.

"La reapertura alcanza a prácticamente la totalidad de los rubros del área, aún se continúa trabajando con bajos niveles de uso de su capacidad instalada y, en los primeros siete meses del año, la industria pyme acumula un descenso anual de 22,2 por ciento", explicó la entidad pyme. "El dato positivo del mes es el crecimiento del ramo productos de caucho y plástico (4,6 por ciento)", destaca CAME. 

En la comparación anual, el menor declive ocurrió en electrónicos e Informática, con un retroceso interanual de 7,8 por ciento a raíz de una mayor demanda de estos productos, señaló la Encuesta Mensual Industrial de CAME entre 300 industrias pymes de todo el país. En Alimentos y bebidas la baja anual fue de 8,8 por ciento con mucha disparidad entre empresas ya que, por ejemplo, la elaboración de vinos y otras continúan con "una situación difícil".

"Sectores como calzado y marroquinería continuaron con caídas muy profundas (-44,5 por ciento), debiendo cerrar por varias semanas algunas fábricas frente a la escasa demanda y la reducción de los ATP del gobierno", aseguró el informe. Por último, los rubros indumentaria y textil fueron los rubros con descensos más profundos en la comparación anual con una disminución de 34,2 por ciento, a raíz de los comercios cerrados y los protocolos de ingreso a los locales lo que "reduce la eficiencia del negocio que se traslada a los pedidos industriales".

Fuente:www.eldestapeweb.com