Por Luis Autalan

El scretario general de la UOM Morón, Sergio Souto, graficó el escenario severísimo de ese sector industrial en la emergencia por el Covid-19. Más allá del respaldo a las decisiones del Gobierno para contener la pandemia, toda la dirigencia metalúrgica asume que esta crisis abarca las suspensiones al por mayor en relevantes empresas de todos los rubros, fenómeno agravado en las pymes y también la imposibilidad de pagar los sueldos de este mes en muchos casos.

"Todas las empresas grandes y medianas plantearon suspensiones en base al artículo 223 (Ley de Contrato de Trabajo) el cual les permiten acordar una suma no remunerativa. Por otro lado las pymes y talleres no plantean nada, simplemente algunas pagaron el 60% y 50% de las quincenas ahora", reseño el dirigente a BAE Negocios.

"Para los sueldos de abril nos dicen que no van a poder pagar y que la dinámica de créditos que se anunciaron vienen muy lentos en cuanto a su otorgación". A esta altura en la UOM, no lo manifiestan públicamente pero comparten la mirada que abarca a otras organizaciones sindicales, en que las entidades de crédito "no tienen demasiado entusiasmo en llevar la solidaridad a las carpetas de préstamos".

Además de su mandato en la UOM de Morón, Souto es director de Relaciones Laborales de la comuna de Morón. La UOM, en estimaciones extraoficiales tiene a la fecha 180.000 trabajadores en actividad, cifra a la cual llegaron luego de la pérdida de empleo que los castigó como a todo el arco industrial en los últimos cuatro años. Empero ese dato estadístico es superado hoy por los datos duros de suspensiones, recortes de salario y una yapa: las empresas no están realizando los aportes jubilatorios que corresponden.

Souto comentó también la actividad sindical en cuanto al cumplimiento de las medidas adoptadas por el aislamiento social y obligatorio como también para la parcial reactivación dispuesta. Además, vislumbró un nuevo escenario en el mundo del trabajo post pandemia. "La realidad nos obliga a una lectura que no puede tener errores en la visión de que cuando se supere la emergencia los empleadores, sindicatos y gobernantes deberemos ser capaces de pararnos frente al mundo ante el nuevo escenario que vendrá sin lugar a dudas". El metalúrgico hizo referencia a las cuestiones en materia de sanidad y desarrollar trabajos a distancia, como también establecer qué dinámica de tutela sindical tendrán los trabajadores en esa modalidad.

"Después de esto, nadie puede discutir la intervención del Estado, cuál es su rol. Y no es soberbia decir que nosotros lo tenemos muy claro. Pudimos apreciar un paquete de medidas que tomó el Gobierno apenas comenzó su mandato en defensa de la industria nacional, algo que hoy parece muy lejano pero está cerca en el tiempo. Superada la pandemia la mirada de un Estado que respalde a su industria y a los trabajadores no puede cambiar". De esta forma apuntó que a principios del año la actividad respecto a la capacidad instalada era del 50% y hoy la paralización agravó un escenario que apenas había tenido algún latido de recuperación en el arranque del año.

En las seccionales de la UOM, tanto Vicente López a cargo de Emiliano Gallo como en la de Morón a la labor sindical se le sumó la actividad social para incluso llevar bolsones de comida a los trabajadores suspendidos o en situación complicada. "En las comunidades siempre tenemos un trabajo social y ahora se incrementó. Eso va más allá de la representación sindical de nuestros compañeros en defensa de sus derechos y los convenios de labor. La situación de estos días hace que se redoblen esfuerzos, pero es nuestra obligación", dijo Souto.

Fuente:www.baenegocios.com