Inició la recepción de las declaraciones juradas para obtener el certificado de emergencia agropecuaria y las comitivas del Ministerio de Producción de la provincia empiezan a recorrer el interior provincial. A la par, preparan remates comunitarios de hacienda. En diálogo con NORTE de Corrientes, el titular de la cartera productiva, Jorge Vara, explicó los alcances de los beneficios legales: “Hay algunos pequeños productores que ni siquiera los hacemos entrar por el Consejo Federal de Inversiones (CFI), que generalmente son más chiquitos, y a los que va un aporte no reintegrable (subsidios). El que se acoge al CFI sería más mediano que chico. Hay mucha gente que perdió, por ejemplo, unas líneas de mandioca y un poco de sementera baja, como lechuga, para los cuales salen unos subsidios. Pero no se sabe de cuántos subsidios se disponen y de cuánto dinero disponemos, porque la ley no especifica cuánto hay que darle a cada uno”. “En nuestro caso, si se puede dar más al productor, se lo hace. Ahora nos ocupamos de la parte formal y estamos cerrando la asistencia financiera, estamos en un trabajo que es necesario para modular la asistencia. Pero tampoco sabemos cuánto es el dinero disponible ni tampoco cuántos damnificados vamos a tener. Estamos tratando de ser estrictos para que la ayuda llegue a quien le corresponda, porque los recursos siempre son limitados. Todavía no podemos tener siquiera una estimación de los afectados, pero nos estamos ocupando”. El funcionario, acompañado del subsecretario de Producción, Jorge Fedre, suministraron a este diario la siguiente información: “La provincia de Corrientes tiene 8,9 millones de hectáreas, y estimamos que productivamente hay alrededor de 7 millones, hay 700.000 de parque provincial, sumado a lo que la viuda de Tompkins está donando a Parques Nacionales, que es intangible. Después está todo lo que son rutas, ciudades, etcétera. Estimamos por el cobro del impuesto inmobiliario rural que tenemos cerca de 7 millones de ha, en realidad un poquito menos. El 85% es de uso ganadero y el 15% es de uso forestal, en primer lugar, y el resto agrícola. Hay 500.000 forestadas y aproximadamente 160.000 mil agrícolas, de las cuales 100.000 son de arroz y 60.000 el resto de los cultivos”. Por otro lado, explicó que el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria demostró en un mapa que hubo 900.000 hectáreas con agua en el momento pico de la inundación, hace 10 días. “Fue presentado en la Comisión Nacional de Emergencia. La que más compromiso tiene es Santa Fe, y en superficie nosotros estamos con 900.000 hectáreas, aunque hemos calculado un millón, así que no hay mucha diferencia con lo que marcó el Instituto de Suelo y Agua de Castelar, del Inta. Pero ahora no quedan mas de 600.000, por que el agua está drenando. El peor efecto fue en la zona baja y los valles de inundación de los ríos. Claro que esto no incluye lo que siempre tenemos de agua, ya que no se suman las aproximadamente 600.000 hectáreas de agua que siempre tenemos en la provincia. Solo se cuenta lo extraordinario”, dijo Vara. s