A días de cumplir su primer año de gestión, Calomarde perecería haber decidido el rumbo y las prioridades de su gobierno. Las que, a juzgar por lo que se puede observar a simple vista, no se diferencian mayormente de las de su antecesor en el cargo.

El gobierno de Calomarde, al igual que el anterior, haciendo gala de una gran insensibilidad, ha optado por volcar recursos en espacios públicos de esparcimiento, que son necesarios, aunque, no prioritarios en el actual contexto económico de crisis. Además de tomar con gran indiferencia los numerosos e insistentes reclamos de atención en materia de desarrollo social y viviendas, según se puede constatar a través de las redes sociales.

La problemática social en nuestra localidad tiende a agudizarse empujada por la crisis económica nacional y ayudada por la inacción e indiferencia de los funcionarios del gobierno municipal, que de esta manera,  incumplen con sus promesas de campaña y defraudan las expectativas que habían generado inicialmente, incluso en sectores de la oposición, que esperaban que se diferencie de su antecesor por dedicar mayor inversión en viviendas y el área social; desatención que caracterizó a la administración Maydana.

La situación es sumamente grave, de profundización de la crisis económica, de aumento de la pobreza y la indigencia, con una pronunciada caída de la actividad económica consecuencia de la pérdida del poder de compra de los sectores asalariados, repercutiendo con mayor crudeza y dramatismo en localidades del interior y en particular en un número cada vez más importante de familias que sufren las consecuencias de habitar en viviendas sumamente precarias, con todas las secuelas que ello acarrea fundamentalmente en la salud física, psicológica y social de sus integrantes.

En síntesis: "La dolorosa situación económica golpea con mayor crudeza en los sectores mas necesitados y olvidados, exponiendo la indiferencia e insensibilidad de los actuales gobernantes." 

Tiempo para torcer el rumbo hay, habrá que ver si existen convicciones, voluntad y decisión política para hacerlo.

Por ahora para evaluar lo poco hecho por la actual administración alcanza con saber mirar.

Como reza un viejo refrán: "Para muestra sobra un botón". Dios y el pueblo dirán.

Fabián de Luca