Vecinos de al menos 20 barrios periféricos sufrieron con mayor crudeza la inclemencia meteorológica que azotó ayer a la siesta a esta capital y que provocó anegamientos de avenidas troncales y calles de servicio, además de viviendas. También se interrumpió el servicio de energía eléctrica y como consecuencia de la gran cantidad de agua acumulada en puntos neurálgicos de la ciudad hubo embotellamientos, muchos autos naufragaron. El vendaval se desató pasado el mediodía y en apenas dos horas cayeron más de 100 milímetros; la lluvia más copiosa se produjo al inicio, según el intendente Fabián Ríos en la primera hora se registraron más de 80 milímetros. La Estación Meteorológica del Instituto Correntino del Agua y el Ambiente (Icaa) marcó 109 mm en apenas un par de horas. Luego siguió lloviendo durante toda la tarde, pero con menos intensidad, al cierre de esta edición persistía el mal tiempo y el pronóstico indica nuevas precipitaciones hoy sábado. Debido al colapso de la red de desagüe pluvial las calles se volvieron intransitables hasta casi las 17, cuando comenzó amainar el temporal, durante ese tiempo la ciudad estuvo virtualmente paralizada. La Municipalidad ordenó frenar la circulación de colectivos y por eso la gente no pudo viajar. Fue una medida preventiva. De hecho, muchos faltaron al trabajo o llegaron tarde en el horario vespertino. “Hay varios barrios donde los colectivos no pueden ingresar”, sostuvo el subsecretario de Transporte de la Comuna, Marcelo López Lecube, quien destacó que la medida fue tomada teniendo en cuenta la grave situación que se observaba en los barrios y para evitar problemas mayores, provocando que el agua ingresara a las viviendas. A su vez, el secretario de Medio Ambiente, Félix Pacayut, en diálogo con este medio destacó que en el momento en que llovió más intensamente las calles estuvieron totalmente anegadas, pero luego la red respondió con eficiencia. No obstante, a las 18, en varios puntos de la ciudad había todavía mucha agua acumulada en la vía pública. Por ejemplo, en calle Las Violetas, que conecta avenida Libertad con Molina Punta, había casi un metro de agua en las bocacalles, los colectivos 105 y 110 no ingresaban al barrio. El puente del barrio Docente, en esa zona, sufrió un desmoronamiento y lo mismo sucedió en la Costanera Sur con la avenida Jorge Manuel Romero, que se hundió. La lluvia socavó el pavimento y se abrió un cráter de 20 metros de longitud. En contacto con este medio, el titular de Defensa Civil de la Provincia, Orlando Bertoni, remarcó: “Las consecuencias de las lluvias se sintieron en toda la ciudad, no así en el interior, estamos recorriendo los barrios para evaluar daños pero hasta el momento no hay familias afectadas”, dijo en comunicación telefónica con NORTE de Corrientes en medio de la tormenta. A todo esto, el intendente Ríos se declaró en virtual situación de “emergencia” y dijo que ningún punto de la ciudad estuvo a salvo del evento climático (Ver página 13). Según los datos actualizados hasta la tarde de ayer, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) daba cuenta de la persistencia del alerta para toda la región, mientras que adelantaba que para la jornada de hoy continuarían las precipitaciones de variada intensidad. En cuanto a las temperaturas, se espera que se ubiquen entre los 20º y los 30º.s