Incertidumbre y preocupación en Goya por el futuro laboral de los casi 300 empleados de la fábrica de cigarrillos Massalin Particulares, que funciona en esa ciudad. Tras el anuncio oficial de las suspensiones masivas al personal de la planta goyana, NORTE de Corrientes dialogó con uno de sus empleados, quien prefirió preservar su identidad, y comentó que “les dieron vacaciones pagas a todo el personal hasta el próximo lunes”, pero hasta el momento desconocen cómo continuará su situación laboral dentro de la empresa, ya que a los empleados con mayor antigüedad meses atrás ya les habían ofrecido el retiro voluntario, apuntando a una jubilación anticipada. Pero ante este panorama, crece el hermetismo, ya que los trabajadores evitan profundizar la información, por temor a represalias. Hasta el momento el argumento de la empresa es que el stock interno sobrepasa las ventas por lo que necesitan suspender el proceso de producción local. Por otra parte, una fuente allegada a la fábrica comentó a este diario que “llama la atención toda esta situación porque se agrandó la producción de Massalin, en Goya se ampliaron las instalaciones de la fábrica por eso hay más operatividad”. Además aclaró que los empleados que cumplen funciones dentro de la planta no llegan a los 300. “Hay mucho hermetismo y temor, ellos no quieren hablar demasiado”, comentó la fuente allegada de la fábrica a este diario.

Crisis a nivel nacional

De acuerdo con un comunicado de prensa del Sindicato Único de Empleados del Tabaco (Suetra), esta semana, y por primera vez en sus más de 110 años de producción en el país, la empresa Massalin Particulares se vio obligada a parar sus fábricas en Merlo (Buenos Aires) y Goya para ajustar stock tras la caída del 20% de los volúmenes de venta desde el aumento del impuesto interno decretado por el Ministerio de Hacienda en mayo pasado. Desde la entidad se comunicó también que “las autoridades del Gobierno decidieron subir los impuestos a los cigarrillos al 80% del valor de venta al público, convirtiéndolos en los más altos de América Latina y ubicándolos entre los más altos a nivel mundial. Todo esto se realizó sin mantener diálogo alguno con los trabajadores ni las empresas, aseguran desde Suetra. Tras las medidas dispuestas a nivel nacional, el sector tabacalero anunció que se subió el precio más del 50% de un día para el otro, provocando una merma del 30% en la producción, “perjudicando a trabajadores, empresas, consumidores y abriéndole la puerta al contrabando”.s

Fuente:www.nortecorrientes.com