Evasión y fuga de capitales
En la Argentina se propicia la apertura de la cuenta de capital, para lo cual se acelera la devaluación del tipo de cambio oficial que implica una brutal transferencia de recursos de los que tienen ingresos fijos a los que pueden fijar precios. Por supuesto, cuando mayor es esa capacidad de fijar precios, mayor es a su favor la apropiación de recursos, a la par que se posibilita la tenencia de divisas y las operaciones denominadas contadas contra “liqui”, que no es otra cosa que permitir el arbitraje de bonos y acciones que realizan frecuentemente las sociedades de Bolsa con el objetivo de fugar divisas al exterior, dado que compran esos valores en pesos en nuestro país y los “liquidan” en mercados del exterior donde tienen autorizada su venta.