Gómez Centurión se presentó en los tribunales federales para hacer una declaración en la causa que instruye la jueza María Servini para investigar el tráfico de efedrina y el triple crimen de General Rodríguez.

Allí reportó sus sospechas sobre un depósito fiscal que en diferentes oportunidades, durante su breve gestión, quiso inspeccionar y se lo impedían hacer porque le decían que estaban “judicializados”.

Cuando el juez Luis Rodríguez, en reemplazo de Servini, ordenó abrir los contenedores, los investigadores encontraron varios tanques que, de acuerdo a los reactivos, contenían cada uno 25 kilos de pseudoefedrina y estaban allí desde 2010 o 2011.

Fuentes judiciales indicaron que las tareas se seguían llevando adelante para determinar quiénes eran los responsables de ese depósito y si la intención era ingresarlos o sacarlos del país.

Separado

Gómez Centurión fue desplazado de la jefatura de la Aduana semanas atrás después de una presentación judicial del Ministerio de Seguridad que conduce Patricia Bullrich, tras recibir una denuncia anónima y grabaciones donde se involucró al funcionario en supuestas irregularidades.

El presidente Mauricio Macri dispuso su desplazamiento transitorio, ejecutado por el jefe de la AFIP, Alberto Abad.

Gómez Centurión fue defendido enfáticamente por la socia política de Macri y una de las gestoras de la alianza gobernante Cambiemos, la diputada nacional Elisa Carrió, líder de la Coalición Cívica.

El propio Gómez Centurión atribuyó las acusaciones en su contra a una “operación delictiva y mafiosa, con participación de gente que perteneció a los servicios de inteligencia”.